A menudo las familias crecen en un abrir y cerrar de ojos, en Puro Motor experimentamos esta situación con un staff de colaboradores más amplio. Con motivo de la cobertura especial de la quinta fecha del Campeonato Nacional de Motocross en Jacó, nuestros compañeros necesitaban un vehículo espacioso y que brindara un viaje placentero para su despliegue de funciones.
La necesidad fue cubierta con creces gracias a la agencia Nacional Automotriz, representantes de la marca Ford para Costa Rica, quienes pusieron a nuestra disposición el modelo Everest 2017. Un todo terreno de grandes dimensiones y con capacidad para siete pasajeros, asientos de cuero, doble aire acondicionado climatizado y motor Duratorq TDCi diesel de cinco cilindros y 3.2 litros.
A partir de este momento disfrutamos de un transporte de primera clase. El Everest no solo llama la atención por su diseño robusto y su tamaño, sino también por ser un auto versátil. Su motor y potencia motor le permite responder de inmediato a las exigencias y puede pasar de ser un sereno coderito a un agresivo león en cuestión de segundos, sin que sus pasajeros experimenten el cambio de forma brusca o con balanceos en la carrocería.
El consumo, uno de los temas a los que más le prestamos atención los ticos por los altos precios, es un punto muy favorable para este modelo Ford. Tomamos el vehículo con nivel de ¾ en su tanque y esa cantidad alcanzó para el desplazamiento ida y vuelta de San José a Jacó con buen aire acondicionado, un bajo consumo que nos llamó la atención, ya que viajamos con un total de seis personas con el equipo completo para trabajar, así como maletines personales. La sorpresa no terminó ahí, ya que justo cuando llegábamos a la línea que marca la reserva nos fuimos a la estación de servicio y con solo diez mil colones de diesel la aguja llegó a la mitad.
Al final de la jornada el Ford Everest superó nuestras expectativas, ganándose nuestro reconocimiento como un SUV con gran presencia, que puede cumplir a la perfección con un papel familiar o ejecutivo sin ningún complejo.
