Sam Bird se impuso en en el ePrix de Buenos Aires luego de soportar en el final una fuerte presión de parte de Sebastien Buemi, quien largó último y finalizó segundo. Lucas di Grassi completó el podio.
En una jornada que comenzó con incertidumbre para el equipo DS Virgin cuando Jean-Eric Vergne se reportó enfermo y su participación estuvo seriamente en duda, Bird le dio al equipo su primera victoria dentro de la Fórmula E.
El británico, por su parte, alcanzó su tercer triunfo en la categoría, habiendo sido el anterior en la carrera final de la pasada temporada en Londres.
Buemi, quien largó último luego de realizar un trompo en la clasificación, logró avanzar en el pelotón con una conducción agresiva hasta pelear mano a mano por la victoria con Bird en el final, pero no le alcanzó para superarlo.
El tercer puesto quedó en poder de di Grassi, quien suma cuatro podios sobre cuatro carreras disputadas hasta aquí en el campeonato, pero nuevamente no pudo contener a Buemi, quien sigue al frente del torneo con cuatro puntos de diferencia sobre el brasileño.
Stephane Sarrazin finalizó en la cuarta posición, delante de Nicolas Prost, y Loic Duval, mientras que Nick Heidfeld, Robin Frijns, Oliver Turvey y Bruno Senna completaron los diez primeros.
El mexicano Salvador Durán inició la carrera pero no la pudo completar ya que el auto que había dañado en la clasificación no pudo ser reparado a tiempo.
La historia de la carrera
Bird, autor de la pole position, comenzó manteniendo la punta, seguido de cerca por Prost, Antonio Felix da Costa y Sarrazin, mientras que Frijns y di Grassi superaban al debutante Mike Conway, de sorprendente labor en clasificación, quien caía al sépimo puesto.
Más atrás, Buemi buscaba ganar terreno rápidamente luego de su error más temprano y después de dos vueltas ya ocupaba la 14° posición.
En cinco vueltas cumplidas, Bird se mantenía al frente, aunque sin poder alejarse de Prost y con da Costa logrando continuar cerca del dúo de punta.
Por la disputa del campeonato, di Grassi superaba a Frijns para ser quinto y comenzaba a presionar a Sarrazin, a quien superaría en la octava vuelta, en tanto que Buemi ya era décimo.
Bird seguía sin alejarse en el liderazgo, y a Prost y da Costa pronto se les sumó di Grassi para conformar un tren de cuatro autos encerrados menos de dos segundos, con el portugués concretando en la vuelta 13 una decidida maniobra para lanzarse por dentro y superar a Prost, aunque luego debería abandonar por problemas en el software de su auto.
En ese momento iniciaron las paradas en pits para cambiar de auto, algo que salió a favor de di Grassi, ya que el brasileño ingresó tercero y salizó segundo, delante de Sarrazin, Buemi y Conway. Prost, en tanto, sufría una pasada de largo en una frenada y caía en el clasificador.
A 16 vueltas del final, Buemi se lanzaba a superar a Sarrazin para ser tercero en el mismo momento en que salía a pista el auto de seguridad para retirar el auto de da Costa, por lo que el suizo debía devolver la posición al francés, aunque nada feliz con ello.
En el reinicio, Bird se alejó un segundo de di Grassi, mientras Buemi iba al ataque contra Sarrazin, a quien volvería a supera fácilmente para tomar la tercera posición.
Di Grassi, en tanto, no tardaría en acercarse a Bird para pegarse al auto del británico y presionar al piloto de DS Virgin, al mismo tiempo que Buemi achicaba cada vez más la distancia con los dos, por lo que en poco tiempo los tres corredores ya peleaban por la victoria en Buenos Aires.
A siete giros de finalizar la carrera, Buemi lograba superar a di Grassi en un duelo donde estaba el juego el segundo puesto y también el liderazgo del campeonato.
El brasileño intentaba recuperar lo perdido mientras Bird aprovechaba para alejarse de ambos, pero no por mucho tiempo.
La parte final de la carrera tuvo a Buemi presionando a Bird hasta el límite para llevarse el triunfo, pero el británico pudo resistir el ataque hasta recibir la bandera a cuadros en el primer puesto luego de 35 vueltas de competencia.
Vía MotorSport
