Sebastien Ogier logró su cuarta victoria en el Campeonato del Mundo de Rallies 2013 tras adjudicarse esta tarde el Rallye de Italia Cerdeña con su Volkswagen Polo R WRC
El francés se impuso en la prueba de la isla mediterránea con 1 minuto y 16.8 segundos de ventaja sobre Thierry Neuville, que a su vez logró su mejor resultado en el WRC con un Ford Fiesta RS WRC. Jari-Matti Latvala completó el podio con su Polo R WRC.
Ogier, que lideró la carrera desde el primer tramo, finalizó la primera jornada con una renta de 46,6 segundos que aumentó durante el día de hoy antes de cruzar la meta. Además, el piloto del equipo alemán logró la máxima puntuación posible cuando se adjudicó los tres puntos extras del Power Stage, lo que le deja con una clara ventaja de 64 puntos al frente de la clasificación de pilotos del WRC.
“Hicimos un rally perfecto todo el tiempo”, dijo Ogier. “Atacamos cuando lo necesitábamos y fuimos más conservadores en las zonas más duras y peligrosas para los neumáticos. Al final logramos una victoria perfecta”.
Neuville logró su segundo podio consecutivo. La buena puesta a punto y los ajustes en los frenos de su Fiesta RS WRC le brindaron la oportunidad de demostrar todo su talento para remontar desde la sexta plaza hasta la segunda tras presionar durante gran parte del rally a Mikko Hirvonen.
Cuando el finlandés de Citroën se vio obligado a abandonar en el TC10 después de un accidente, el belga decidió mantener su ritmo hasta el Power Stage.
“Nos encontramos una vaca en medio del tramo y tuvimos que frenar”; dijo. “No ataqué más porque vi que estaba calcando los splits de Latvala. Creo que nuestra estrategia aquí fue bastante buena y ha sido un rally increíble para nosotros”; agregó.
Latvala ganó el tramo de calificación del jueves, pero sus esperanzas de pelear por la victoria se esfumaron cuando pinchó un neumático en el primer tramo del viernes que le relegó a la duodécima posición perdiendo casi dos minutos con la cabeza de carrera.
Iba quinto la pasada noche, y su recuperación se completó cuando escaló al tercer puesto después del abandono de Hirvonen y de que su presión provocase un error por parte de Dani Sordo. El finlandés finalizó a 31.2 segundos de Neuville y 1 minuto y 31.2 segundos por delante de Sordo.
Parecía poco probable que Sordo pudiese resistir el ataque de Latvala, pero un trompo le dejó definitivamente sin opciones. Con su compañero Hirvonen atrapado en una zanja, el español recibió instrucciones claras de regresar a la asistencia sin percances y salvar unos puntos vitales para la clasificación de fabricantes.
Otro damnificado en la última etapa fue Andreas Mikkelsen. Se celebrara el 24 cumpleaños del noruego, pero en su intento por arrebatarle la cuarta plaza a Sordo se encontró con un regalo que no quería, al abrirse en una curva lenta y romper la suspensión de su Polo R WRC.
Martin Prokop consiguió la quinta posición después de un consistente fin de semana al volante de su Fiesta RS WRC. El checo finalizó a más de cinco minutos de Sordo y con tres minutos de ventaja respecto a Elfyn Evans, con un auto similar.
Después de haber sido empujado a debutar con un World Rally Car en el último minuto a raíz de la cancelación de NasserAl-Attiyah, Evans no cometió ningún error. Este ha sido el mejor debut con un World Rally Car para un campeón de la FIA Academy o el JWRC, eclipsando incluso a Sébastien Loeb.
Evans superó por solo 0.9 segundos a Michal Kosciuszko, que finalizó séptimo con su nuevo Fiesta. Mads Ostberg se reenganchó tras su vuelco de la noche anterior y terminó octavo. El ganador de la categoría WRC 2, Robert Kubica, fue noveno, y Khalid Al Qassimi décimo.
