AFP / El belga Thierry Neuville (Hyundai), que iba cómodamente en cabeza del rally de Suecia, segunda cita del Mundial (WRC), se vio obligado a abandonar después de haber perdido una rueda y haber dañado la dirección de su vehículo, este sábado en la última especial (ES15) de la jornada.
La desgracia de Neuville beneficia sobre todo al finlandés Jari-Matti Latvala (Toyota), que era segundo de la general a 43 segundos y que ahora se coloca como nuevo líder, cuando solo quedan tres especiales por disputarse el domingo. El estonio Ott Tänak, nuevo segundo, y el francés Sebastian Ogier, tercero, también pelearán por la victoria el domingo.
Es el segundo rally seguido en el que Neuville comete un error que le cuesta la victoria en el penúltimo día. También iba líder cuando se salió de la ruta en Montecarlo el pasado mes.
Esta vez el accidente es más doloroso todavía, ya que se dio en una superespecial aparentemente sin ningún riesgo para la general, de 1,9 kilómetros en el hipódromo de Karlstad. El subcampeón mundial golpeó con un lado de la pista, perdió una rueda y sufrió daños en el coche que le impidieron seguir.
Hyundai indicó que volverá a correr el domingo, pero ya sin opciones de victoria en un rally que parecía tener ya en su mano.
Latvala tiene ahora ventaja para ser el ganador en el rally sueco. El estonio Tänak (2º), a 3 segundos y 8 décimas, puede plantar batalla.
El francés Ogier, ganador de los últimos cuatro títulos mundiales y de los dos últimos rallies de Suecia, sube al tercer puesto de la general, a 16 segundos y 6 décimas.
“Todo puede ocurrir”
Hasta el momento de su abandono, Neuville había tenido un día muy positivo.
El belga, antes de la última superespecial, había admitido que durante todo el día había tenido muy presente lo ocurrido en Montecarlo y que por eso fue muy cauto.
“Intento ir controlando. Sinceramente, no disfruto mucho. Es algo delicado, sabemos lo que pasó en Montecarlo. Todo puede ocurrir y he ido siendo muy prudente”, comentó el belga, sin imaginar que sus palabras iban a ser premonitorias y que todo podía pasar, en su contra poco después.
Más allá de lo ocurrido con el belga y el cambio en la clasificación, la jornada estuvo marcada por la anulación de una especial, la duodécima, al comprobar los responsables de la prueba que la velocidad media en ese trazado era demasiado elevada.
En la mente de muchos todavía está muy reciente el recuerdo del accidente del neozelandés Hayden Paddon en Montecarlo, en el que murió un espectador español.
Los pilotos no se sorprendieron por la anulación de ese tramo.
“Nunca es una buena noticia tener una especial anulada, pero puedo entenderlo”, afirmó Ogier.
“No parecía una especial muy peligrosa. Más bien anodina en algunas partes, porque era muy recta”, apuntó el francés.
Además de Neuville, uno de los derrotados del sábado fue el británico Kris Meeke (Citroën). Era quinto en la general antes de la decimocuarta especial, pero perdió el control de su C3 y terminó en el bosque, sin posibilidad de volver a la ruta, perdiendo más de ocho minutos.