El madrileño, que se colocaba ayer líder tras lograr su segunda victoria de etapa, ha tenido que detenerse al final de la décima etapa por problemas en el cambio y ahora deberán esperar a la llegada de las asistencias para poder ser en principio remolcados hasta el vivac o tratar de cambiar la caja in situ.
Según Juanjo Lacalle, manager de Carlos Sainz, el problema en el Peugeot 2008 DKR16 #303 ha sido la rotura de la carcasa de la caja de cambio, algo que ha terminado de enterrar las opciones del ganador del Dakar en 2010. Junto a su copiloto, Lucas Cruz, afrontaban la que posiblemente era la etapa decisiva de las cuatro que quedaban para llegar a la meta de Rosario. Abriendo pista y sin las trazadas de las motos para marcar el camino, Sainz ha perdido mucho tiempo en el inicio de la especial al perderse y pinchar una de sus ruedas buscando el WP1.
Vía DiarioMotor