La primera participación del piloto español Fernando Alonso en las 24 Horas de Le Mans este fin de semana ha recuperado el interés del público, los medios de comunicación y los antiguos pilotos de F1 por esta mítica prueba francesa de automovilismo y por el Campeonato del mundo de resistencia (WEC).
Aunque es demasiado temprano para disponer de cifras sobre este evento, se puede poner como ejemplo lo sucedido en las Seis Horas de Spa-Francorchamps, prueba belga en la que el español hizo su debut en este tipo de carreras el pasado mes de mayo, que “registraron un aumento del 3,51% en la asistencia respecto a 2017”, aseguró un portavoz del WEC.
Una buena noticia después de que esta disciplina sufriera dos años de deserciones con los abandonos de Audi y Porsche, dejando a Toyota, el equipo de Alonso, huérfano de la competencia de otro constructor en lo alto de la categoría reina (LMP1). Una situación poco alentadora para el futuro y lejos de ser lo ideal para el espectáculo.
El organizador de las Seis Horas de Spa-Francorchamps también señaló el hecho de que en las carreras de resistencia el paddock es mucho más abierto que en la F1. Y, de hecho, se vendieron todas las plazas VIP para acercarse al campeón del mundo 2005 y 2006.
El 13% de los visitantes que han entrado a la página web oficial del Campeonato durante esta primera prueba son españoles, y la WEC estima que gran parte accedió sobre todo para informarse sobre su ídolo.
Récord
“En lo que respecta a los medios, acreditamos a 482 en Spa por los 460 del año anterior, teniendo en cuenta que aplicamos criterios de selección más estrictos”, continuó el portavoz apuntando a un récord de solicitud de acreditaciones en el circuito belga, fuera de lo que es el Gran Premio de F1.
“Todavía no podemos dar cifras dado que el proceso de acreditación de Le Mans para las cadenas de televisión todavía no ha terminado”, precisaron por parte de WEC. “Pero preveemos un aumento en este 2018, particularmente por parte de los medios españoles”, añadieron.
De nuevo otra señal esperanzadora, cuando el número de periodistas acreditados cayó de 1405 en 2013 a 1225 en 2017.
También está claro que la búsqueda por parte del popular Alonso de la triple corona del automovilismo (con el GP de Mónaco, que lo ganó en 2006 y 2007, y de las 500 millas de Indianápolis), suscita más interés que la experiencia en Le Mans de su adversario en la F1 Nico Hülkenberg en 2015, saldada con victoria del piloto alemán formando parte del equipo Porsche.
El tirón de ‘Nando’
En Spa, la casi totalidad de las preguntas en la conferencia para los medios tuvieron como destinatario a ‘Nando’ y el español volvió a ser el centro de atención el miércoles por la mañana en Le Mans, donde la sala de prensa de la escudería Toyota se quedó pequeña para acoger a todos los periodistas que deseaban asistir a su comparecencia.
“No quiere decir necesariamente que tengamos más periodistas que antes, pero hay muchas más solicitudes para Alonso que para los otros pilotos”, dijo uno de los encargados de prensa de la firma japonesa.
En el circuito belga, hubo quince expilotos de F1 en la parrilla de salida, mientras que en las 24 Horas se dan cita 23 pilotos y expilotos. Entre ellos está el británico Jenson Button, antiguo compañero de equipo del español y campeón del mundo en 2009, o también el colombiano Juan Pablo Montoya, ganador de siete Grandes Premios.
“Esto funciona un poco como un restaurante: cuando no hay nadie, la gente no se anima a ir, pero cuando está lleno, hay siempre hay una gran fila esperando. Primero vino Alonso, después Button, Montoya… Esto atrae a muchos”, analiza con un punto de humor el suizo Sébastien Buemi, compañero del español al volante del Toyota número 8 y expiloto de F1, con Toro Rosso entre 2009 y 2011.
