no descarta la posibilidad de volver a disputar una vez más el Raid más duro del planeta.
El abandono del Dakar por parte de Volkswagen no sólo dejó en tierra al ganador de 2011, Nasser Al-Attiyah, sino que también a Carlos Sainz. El madrileño, ahora consejero de Volkswagen Motorsport y piloto de pruebas ocasional del nuevo Polo R WRC, no descarta la posibilidad de volver a disputar una vez más el Raid más duro del planeta.
El madrileño consiguió la victoria en el año 2010, pero la batalla con su compañero de equipo le dejó con ganas de más. Este fin de semana, con motivo de la participación en el Volkswagen Winter Nights junto a Sébastien Ogier y otros pilotos de la marca, Sainz se volvió a poner a los mandos del Touareg 3 y despertar de nuevo esas sensaciones que te provoca conducir un coche de competición.
La decisión de dejar el Dakar no la tomé yo, fue Volkswagen, y en mi caso no era el momento. Me hubiese gustado hacer uno más, y no es un secreto que estoy mirando qué posibilidades hay. Pero está complicado porque no hay muchos coches ni equipos oficiales que permitan afrontarlo con unas garantías mínimas, y si vuelvo tiene que ser con posibilidades de hacer algo, no ir por ir.
Obviamente la opción de participar con uno de los Mini 4 All del equipo X-Raid es un tema muy complicado debito al contrato que actualmente tiene con Volkswagen.
La situación es complicada, porque yo tengo contrato con Volkswagen, que es una marca alemana, y Mini es del Grupo BMW, por lo que creo que se podría crear un conflicto de intereses importante. Estoy sondeando las diferentes posibilidades y, si encuentro un coche y equipo capaz de conseguir un buen resultado, me apetece la idea.
Vía | AS.com