Los neumáticos tarde o temprano llegará el momento de reemplazarlos debido al desgaste, y posiblemente sean los del tren delantero los que se tengan que cambiar de primero, neumáticos nuevos: ¿Adelante o atrás? Esa pregunta la aclaramos a continuación.
Por lo general los modelos tracción delantera tienden a desgastar más rápido las ruedas de este eje, ya que tienen el propulsor situado sobre ellas, además, las ruedas direccionales son las delanteras así que el desgaste siempre será mayor, porque soportan más fricción.
Es posible que cuando se tenga que reemplazar los neumáticos del vehículo, haya una desigualdad de desgaste entre el eje delantero y el trasero, es lo habitual, no importa si el auto es tracción delantera, trasera o integral.
Neumáticos nuevos en el tren trasero
Esto se debe principalmente a la seguridad activa, los neumáticos nuevos cuentan con un dibujo con mayor profundidad que los gastados, lo cual ayuda a evitar que el vehículo flote sobre el agua que se encuentra en la carretera cuando los neumáticos no son capaces de evacuarla, especialmente cuando se acercan al límite legal de desgaste.
Los neumáticos del tren delantero están menos expuestos a sufrir perdida de adherencia sobre el camino, ya que montan más peso al tener el propulsor encima (excepto los autos que montan el motor en la parte central o en el tren trasero como los Porsche). Por otra parte, el tren trasero es más ligero y en la frenadas el peso se traslada por inercia a la parte delantera, lo que provoca la perdida de adherencia del camino.
Otro aspecto importante está relacionado con la dirección. Es más fácil controlar un vehículo que ha perdido agarre en el tren delantero que uno que ha perdido agarre en el trasero. ¿Porqué? Pues básicamente está en que la corrección más común ante estas pérdidas de control se hace con la dirección y acelerador, en la mayoría de los modelos ambos elementos actúan en el tren delantero.
Siguiendo en este punto, también hay que tener en cuenta que los neumáticos gastados están más expuestos a sufrir pinchazos, por lo que, a la hora de priorizar, es preferible que los neumáticos que estén más expuestos a sufrir un pinchazo sean los delanteros. Resulta más fácil recuperar el control de un auto que ha perdido el tren delantero que de uno que ha perdido en trasero.
La rotación, una práctica necesaria
Con el tiempo, la superficie va perdiendo agarre y elasticidad, es real que los neumáticos no tienen una fecha de caducidad, y que sus propiedades dependen más de las temperaturas y condiciones climatológicas a las que se les haya sometido. Rotar los neumáticos del eje posterior al delantero y montar en el posterior los nuevos, es una práctica sana que podría salvar vidas.
