Los rumores de que el doble campeón del mundo de la Fórmula Uno estaría dando el paso hacia la escudería Ferrari en los próximos meses, con lo que la escudería roja tendría en sus filas a dos pilotos de primera línea, ambos candidatos al título.
Por: Renger Infante – [email protected]
Esta situación abre la disyuntiva si en un equipo de dos autos, deberían de ubicarse dos pilotos de primera línea y las consecuencias que esto podría traer.
Es claro que tanto Vettel con Fernando Alonso, que tiene contrato renovado por varias temporadas, estarían jalando cada uno por su lado en busca de sumar un título más, lo que evidentemente generaría un clima poco amistoso a lo interno de la escudería, y las rivalidades entendibles entre ambos bandos.
Ferrari siempre ha tenido claro que en su equipo un piloto lleva el estandarte de ganador y el otro, es una figura hecha para trabajar por el equipo, asegurando la mayor cantidad de puntos en cada carrera y fungiendo como un plan B en caso de que el estelar enfrente problemas.
Así podemos recordar con el uniforme rojo a Eddie Irvine, Rubens Barrichello y más recientemente a Felippe Massa, que tuvieron el trabajo de ser los escuderos de Michael Schumacher, llegando al punto de recibir ordenes de equipo y dejarse pasar por el alemán a poco de la meta y entregar victorias o mejores posiciones para el entonces estelar del equipo.
La llegada de Lewis Hamilton al gran circo de la F1 volvió a atizar este tema, cuando el inglés, formado desde su niñez con la escuela de Mclaren llegó a ser compañero de Fernando Alonso, que venía de dos títulos en Renault y que portaba el obvio número 1 del equipo, pero el favoritismo del equipo por el novel corredor, provocó una guerra interna, que dio al traste con las opciones de ser campeones ese año.
Actualmente, pilotos sobresalientes luchan a lo interno de sus escuderías por dejar de ser considerados segundos en la formación y a golpe de resultados tratan de mejorar su imagen, pero esta claro que fueron contratados para ser los complementos.
Mark Webber lucha contra la sombra de Vettel en Red Bull, Jenson Button hace lo mismo contra Hamilton, Massa opacado por Alonso, Nico Rosberg contra Schumacher, Romain Grosjean contra Kimmi Raikkonen, entre otros.
Nos queda claro que la noticia o rumor que ha corrido en las últimas semanas que colocan al alemán en las puertas del Ferrari, podría generarle a la escudería de Maranello una cadena de problemas con la lucha de un protagonismo que bien podrá terminar con un fracaso de grandes dimensiones.
O es que acaso no recordamos el accidente de la temporada pasada, cuando Hamilton y Button se tocaban en mitad de la recta en el Gran Premio de Canadá?
En un gallinero solo hay campo para un gallo bravo, dicen los abuelos, y Ferrari estaría poniendo en juego mucho de su trabajo y prestigio si apuesta para el 2014 por una formación tan exclusiva.
Hay que tener también en cuenta que Sebastian Vettel cuenta desde su juventud con el padrinazgo de Michael Schumacher, y que el excampeón sigue teniendo contactos y respeto dentro de la escudería, y estarían aceptando cualquier recomendación que venga del que les dio 7 títulos de Fórmula Uno.
Error, riesgo, atrevimiento o previsión para el futuro? El ajedrez de la F1 se desarrolla a mucha velocidad y con la visión puesta en otros puntos, donde el ojo normal no llega todavía. No quedará más que esperar un año más y descubrir cuál será la próxima movida de los dueños del Cavallino Rampante