Mercedes se apuntó con la victoria del finlandés Valtteri Bottas por delante del británico Lewis Hamilton un cuarto doblete en otras tantas carreras en 2019, en el Gran Premio de Azerbaiyán este domingo, firmando el mejor inicio de temporada de la historia para una escudería de F1.
El alemán Sebastian Vettel (Ferrari) completó el podio delante del holandés Max Verstappen (Red Bull) y del monegasco Charles Leclerc (Ferrari).
Las ‘Flechas plateadas’ mejoraron así el inicio de Williams en 1992, y cuentan con 74 puntos de ventaja respecto a la Scuderia en la clasificación de constructores.
“¡Gran trabajo chicos! Estoy muy orgulloso de formar parte de este equipo. Estamos rindiendo muy bien. Fue una carrera muy dura, Lewis me puso bajo presión, pero estaba bajo control”, señaló Bottas nada más finalizar.
Batalla interna
Después de sus tres dobletes en el inicio de la temporada 1992, Williams conquistó el título mundial de pilotos y de constructores, con el británico Nigel Mansell delante del italiano Riccardo Patrese.
En la general de pilotos, el finlandés Bottas, que salió desde la pole por delante de Hamilton, cuenta con un solo punto más que su compañero británico. Vettel, 3º, acusa 35 puntos menos.
El récord de dobletes en una temporada (5) está en manos de Mercedes en 2014 y de Ferrari en 2002. Entre todas las temporadas, la Scuderia ostenta aún el récord de dobletes (83), por los 48 de Mercedes y los 47 de McLaren.
“Valtteri mereció la victoria. Ha pilotado muy bien y no cometió errores”, apuntó Hamilton al final del Gran Premio. “Es el mejor inicio de temporada que ha vivido nunca nuestro equipo y estoy contento de haber participado”, añadió.
Parece que empieza a esbozarse una interesante lucha interna entre el mediático Hamilton y el discreto Bottas, que durante el invierno decidió quitarse el traje de acompañante del británico que se le había impuesto.
Durante su primera temporada con Mercedes en 2017, tras cuatro años en Williams, el finlandés consiguió sus tres primeras victorias y cuatro primeras poles pero nunca pareció en disposición de medrar en el mano a mano entre su compañero de equipo, finalmente campeón, y Vettel.
2018 fue un mal año, en el que no obtuvo ninguna victoria -aunque sí dos poles- debido a la mala fortuna y a una estrategia de Mercedes favorable a Hamilton a partir de la segunda parte de la temporada.
Pizca de insubordinación
Pero en los test invernales de 2019 Bottas apareció con barba, tal vez para atenuar esa imagen de buen chico, y aseguró haber cambiado su punto de vista con respecto a la vida y a las carreras.
Acompañada de su nueva imagen vino una pizca de insubordinación, como demostró por ejemplo al adelantar a Hamilton en el primer GP de la temporada en Australia para obtener la victoria o al quedar por delante de su compañero el sábado en la calificación del GP de Azerbaiyán.
Con un mal comienzo este domingo en la carrera, el finlandés resistió los ataques de su vecino de garaje en las primeras vueltas y al final de la carrera.
Y todo ello sin órdenes de equipo. Al contrario que Ferrari en las tres primeras carreras, Mercedes ha dejado que sus pilotos se enfrenten, lo que anticipa nuevos combates en el futuro.
Especialmente porque no parece que la Scuderia italiana pueda plantar cara a Mercedes a corto plazo. “Tenemos mucho trabajo en las próximas semanas”, reconoció Vettel este domingo. “Pero el monoplaza es bueno por lo que estoy seguro de que cuando arreglemos nuestros problemas volveremos a ser competitivos”.
Falto de ritmo contra las ‘Flechas plateadas’ en Australia, China y Azerbaiyán, y con averías en Baréin, Ferrari tiene mucho trabajo por delante.
Tradicionalmente escenario de carreras locas, el GP azerí de 2019 transcurrió esta vez con tranquilidad.
El mexicano Sergio Pérez (Racing Point), el español Carlos Sainz Jr (McLaren), su compañero británico Lando Norris, el canadiense Lance Stroll (Racing Point) y el finlandés Kimi Raikkonen (Alfa Romeo Racing), completaron el top-10 de la carrera.
Leclerc sumó el punto a la mejor vuelta en carrera.
Por: AFP
