La “Reina de Nurburgring” Sabine Schmitz, falleció hoy a los 51 años víctima de un cáncer.
Schmitz había anunciado en 2017 que padecía esa enfermedad, y aunque parecía que la había superado, no fue así.
Sabine nació en 1969 en Adenau, una población situada a tan sólo 10 kilómetros del legendario trazado, con lo que creció viendo carreras en el llamado “Infierno verde”. En 1996 y 1997 ganó las 24 Horas de Nurburgring guiando un BMW M3 junto a Johannes Scheid, de este modo se convirtió en la primera mujer en vencer en esta prueba.
También era una de las pilotos del “Ring Taxi” llevando a los pasajeros a dar vueltas a toda velocidad en la pista de 20,3 kilómetros de forma “turística”. Fue este trabajo, en el que registró aproximadamente 1200 vueltas a la pista por año.
Schmitz compitió en numerosas pruebas de resistencia y en campeonatos alemanes, además participó en programas de televisión como Top Gear desde el 2004, lo que la hizo más famosa en todo el planeta.