Ferrari ha decidido ir más allá de los autos y se ha lanzado a crear un hiperyate exclusivo que sirva a la vez como garaje del SF90 Stradale y para surcar los siete mares. Se trata de un estudio de la compañía italiana Lazzarini Design, responsable de algunos de los inventos más extravagantes y lujosos de la industria marítima.
No hablamos de un yate de grandes instalaciones, pero sí visualmente impactante, inspirado en la firmade Maranello y bautizado como ‘el Ferrari del mar‘.
Un yate capaz de navegar a gran ritmo sin perder lujo ni comodidad: alcanza velocidades de 70 nudos y es capaz de navegar a 35 nudos con las puertas de ala de gaviota abiertas.
Construido con una estructura de fibra de carbono, parece uno de los superdeportivos de la firma y es que hasta su exterior es de color Rosso Corsa y su cabina de mando parece un cockpit y está claramente inspirada en el mundo de las carreras, desde los asientos hasta los controles.
Un yate impulsado por un trío de motores MAN V12, con una transmisión Arneson y un propulsor central Hamilton Jet. La velocidad máxima la alcanza con el despliegue del ala que está escondida en el casco transformable. Ésta hace que la embarcación se eleve parcialmente y que se reduzca la resistencia.
Tiene 27 metros de largo, 6,3 de alto y tiene una manga de 6,7 metros. Ofrece alojamiento de lujo para cuatro personas y tres miembros de la tripulación: los primeros disponen de un par de cabinas en la cubierta principal y en la inferior mientras que los segundos están alojado en los camarotes ubicados debajo.