No se trata de uno de esos rumores que circulan por los pasillos, unas imágenes filtradas en la oficina de patentes o un render sacado de Internet. Ha sido el mismísimo Sergio Marchionne, presidente de la marca italiana, quien ha confirmado que la compañía está trabajando en un todoterreno. Aunque no de forma literal.
Un vehículo que, seguramente, los incondicionales de la marca catalogarán de ‘cavallino peccatore‘, al romper con la tradición de la firma transalpina de fabricar coches deportivos. Pero si hay una forma de ampliar los beneficios y tanto Porsche como Lamborghini ya cuentan con SUV en sus gamas, ¿por qué iba a ser menos Ferrari? Sobre todo, cuando sus planes pasan por duplicar sus beneficios, de aquí a 2022.
Precisamente, la principal preocupación de Sergio Marchionne es que el hecho de comercializar un todoterreno reste prestigio a la marca: “Estamos trabajando muy en serio en el volumen de producción. Tenemos que aprender a entender la relación existente entre la exclusividad, fruto de la escasez de un producto, con la ampliación de nuestra cartera de modelos”. En cualquier caso, durante los 30 próximos meses, se tomará la decisión definitiva acerca del volumen de producción del modelo.
Por ahora, no existen datos oficiales acerca del futuro todoterreno de Ferrari, aunque son muchas las voces que afirman que el ‘Cavallino Rampante‘ ya tiene un código interno: F16X. Se espera que sea un modelo completamente nuevo, dotado de un sistema híbrido, compuesto por un propulsor V8 de gasolina, combinado con otro eléctrico.
Por lo demás, parece que la competencia entre los fabricantes de superautos se trasladará al segmento de los SUV en los próximos años, donde militarán modelos como el Lamborghini Urus, el Rolls-Royce Cullinan y el Aston Martin DBX. Estamos seguros de que, en muy poco tiempo, podremos ofrecerte más datos.
Vía Motor1.com
*Imagen de carácter ilustrativo