El francés Sebastien Loeb (Citroën DS3) conservó este jueves el liderato en el rally de Montecarlo, tras la disputa de la segunda jornada, en la que el español Dani Sordo (Mini) acabó segundo
El francés Sebastien Loeb (Citroën DS3) conservó este jueves el liderato en el rally de Montecarlo, tras la disputa de la segunda jornada, en la que el español Dani Sordo (Mini) acabó segundo.
Loeb, campeón mundial los últimos ocho años, ya había acabado primero la primera jornada, el miércoles, después de que el finlandés Jari-Matti Latvala (Ford Fiesta RS) tuviera que abandonar en la cuarta especial al salirse de la carretera cuando iba en cabeza provisionalmente.
En rutas francesas principalmente secas, Loeb hizo valer su talento sobre el asfalto y aumentó su ventaja sobre los dos únicos hombres que parecen en condiciones de poder inquietarle en la lucha por la victoria, Sordo y el noruego Petter Solberg (Ford Fiesta), tercer clasificado.
Tan sólo que se ponga a nevar el viernes en la zona de Vercours y de Hautes-Alpes y un error de Loeb con los neumáticos parece ser un obstáculo para que el francés se lleve la victoria en el primer rally de la nueva temporada.
En la general, cuenta con una ventaja de un minuto y 37 segundos con respecto a Sordo y de un minuto y cuarenta segundos sobre Solberg.
Más retrasado, a más de tres minutos y medio, está ya el finlandés Mikko Hirvonen (Citroën DS3), el hombre con el que pugnó el año pasado por el título mundial, mientras que su compatriota Sebastien Ogier (Skoda Fabia S2000) abandonó por una salida de ruta en la décima especial.
“Tenemos que continuar con este ritmo y continuar así. Todo lo que hemos conseguido se puede perder, ya que si hay nieve y elegimos mal los neumáticos, podemos fácilmente perder un minuto”, señaló el alsaciano.
Sordo, que fue el más rápido en la octava especial, es segundo, como el miércoles, pero ahora a más de minuto y medio, más de treinta segundos más que un día antes. Solberg, sólo a tres segundos de Sordo, dijo estar sorprendido de ir tercero.
“No pensaba ser tan rápido en mi primera carrera en un Fiesta, después de haber hecho muy pocos ensayos”, dijo el piloto nórdico.
“El objetivo ahora es que Peter termine el rally sume puntos”, anunció Gerain Quinn, patrón de competición en Ford Europa.
Por su parte, Ogier, en su pequeño Skoda Fabia S2000 de la categoría S-WRC, estaba contento en la mitad del día con un quinto puesto provisional, al ser recibido por Kris Nissen, patrón de Volkswagen Motorsport, y por el piloto español
Carlos Sainz, pero todo cambió por la tarde.
Su carrera terminó por una salida de pista a cinco kilómetros del final de la décima especial. En este rally de Montecarlo, una salida de la carretera es sinónimo de abandono obligatorio.
El viernes, las previsiones meteorológicas son de lluvia o nieve. Si así es finalmente, el rally puede entrar en el terreno de lo imprevisible, mientras que Loeb intentará hacer valer su experiencia para llegar al puerto de Mónaco, por la tarde noche, al frente de un rally que tiene ya bien encarrilado.
