Después de sus triunfos en Monte Carlo y Suecia, el piloto de Volkswagen fue el encargado de abrir pista en las dos primeras jornadas en México, lo que le perjudicó al encontrarse unos tramos repletos de tierra suelta en su superficie.
Por el contrario, su compañero de equipo Jari-Matti Latvala salió desde la octava plaza, una posición más favorable y superó desde el inicio a Ogier, consiguiendo una gran ventaja al frente de la general. El francés y su copiloto, Julien Ingrassia, consiguieron acabar segundos el viernes y continuaron con su ataque en los tramos del sábado y del domingo, aunque no pudieron dar caza a Latvala.
“Julien y yo no nos arrepentimos”, ha dicho Ogier. “Lo dimos todo de principio a fin. Nuestras elecciones de neumáticos eran arriesgadas para compensar nuestra posición de salida y estuve atacando al límite. De todos modos, no podríamos haber esperado nada mejor que la segunda plaza, por lo que es un buen resultado”.
Ogier e Ingrassia aumentar su distancia al frente del campeonato al sumir los tres puntos extras del Power Stage y salieron del rallye número 100 de su carrera en el WRC con una diferencia de 35 puntos sobre el segundo clasificado, Mads Ostberg.
“Al final, este rallye fue muy bien para el campeonato, sólo he perdido seis puntos con Jari-Matti, al que todavía considero que es mi mayor rival por el título”, ha añadido. “Todavía dispongo del equivalente a dos victorias sobre él y la diferencia se ha ampliado entre yo y mi rival más cercano”.
Vía WRC
