El 12 veces ganador del Dakar señaló que este Dakar no será uno de los que se conserven en su memoria por la falta de desafíos en la ruta.
Stéphane Peterhansel lo decía antes del inicio del Dakar 2016 que no estaba listo para el retiro a sus 50 años de edad, aunque mantenía la duda de cuándo podría ganar su duodécima corona de la prueba; la respuesta llegó tan solo 16 días después cuando este sábado cruzó la meta en la localidad de Río Cuarto.
“Es un sueño volver a ganar, tal ves mucho antes de lo esperado por nosotros. Ha sido sorpresivo porque apenas hace un año empezamos el proyecto. Debemos estar muy orgullosos, porque al principio este proyecto fue complicado”, dijo Peterhansel
Su victoria llega 20 años después del triunfo de un francés con una marca automotriz de aquel país; Pierre Lartigue a los mandos de un Citroën ZX y 16 años después de la victoria de Jean-Louis Schlesser con su famoso buggy-Renault. Pero también, es la quinta victoria de Peugeot en el Dakar, la primera con un piloto francés a los mandos de uno de sus autos.
Pero Peterhansel admitió que la carrera “no ha sido difícil“, en especial por la estrategia que adoptó. “Hemos hecho una carrera normal. Al principio fue complicado, porque en la primera semana todo era muy rápido, y ahí los pilotos de WRC como Carlos Sainz y Sébastien Loeb fueron mejores que yo en los primeros días, pero esto se trata de experiencia.
“En la segunda semana los competidores cometieron errores. Yo me concentré en no hacerlos y evitar los choques. Tengo mucha experiencia, pero también un gran equipo detrás“.
Peterhansel hizo valer su apodo de Mr. Dakar. “Para ser llamado así necesitas experiencia y es lo que hemos obtenido en estos años“.
Una ruta que no recordará
Pero si bien Peterhansel estaba satisfecho por su victoria, reconoció que el recorrido del Dakar 2016 le decepcionó.
“Sin dunas, sin desierto, ha sido un Dakar de pistas de rally. Probablemente no sea mi mejor recuerdo respecto a una ruta del Dakar“.
Para Peterhansel, la emoción llegó en la segunda semana. “Las etapas más difíciles fueron en la segunda semana, con la vuelta en Belén y la entrada a Fiambalá. Para nada fueron sencillas. Fueron realmente etapas del Dakar”.
Pero ahora lo que le importa es festejar en un momento histórico para Francia. “Todo francés para mí. necesito una bandera de Francia en el podio. Que todo sea francés es genial“.
Vía MotorSport
