El Toyota Supra es uno de esos automóviles japoneses míticos donde los haya. Su última generación – conocida por su código interno A80 – fue lanzada en 1993, aunque algunas unidades ya fueron fabricadas en 1992. Hoy hacemos un viaje en el tiempo, a una batalla en circuito en la que Best Motoring enfrentó al entonces nuevo Supra contra lo mejor de Japón.
Sin duda el motor más impresionante del Toyota Supra fue el potente 2JZ-GTE, un seis cilindros en línea sobrealimentado por dos turbocompresores. Un bloque duro como una roca – que también se ofrecía en versión atmosférica con 220 hp – cuya potencia máxima era de 280 hp. Muchos coincidían en que la potencia que pasaba al tren trasero a través de su cambio manual superaba con holgura la cifra de los 300 hp. Con un peso de menos de 1.500 kilos y una puesta a punto deliciosa, el Supra fue una de las sensaciones de la década.
Pero la verdadera prueba era la batalla de Best Motoring en el circuito de Tsukuba, en el que se tendría que enfrentar a lo mejor de la industria japonesa del automóvil. No sólo el Supra con motor de 280 hp estaba incluido en la comparativa, también lo estaba el Supra atmosférico – conocido como Supra SZ – que tenía a su mayor rival en casa: un Toyota MR2 SW20 con 221 hp de potencia y motor central trasero. El hermano mayor del Supra SZ tenía una competencia mucho más dura en la parrilla de salida.
Un Honda NSX, un Honda NSX-R – la versión enfocada a circuito, más potente y aligerada – así como un Mazda RX-7 y un Nissan Skyline GT-R R33. Todos ellos tenían 280 hp de potencia, aunque extraída de motores muy diferentes, y transmitida al suelo de forma dispar. La batalla tenía en el circuito un ingrediente extra, ya que estaba prácticamente inundado, con únicamente el Nissan Skyline GT-R disfrutando de tracción total. Pero el resultado de la batalla y el mejor tiempo por vuelta quizá te sorprendan.
Aunque el Honda NSX-R registró el mejor tiempo por vuelta durante la batalla, no logró pasar de la tercera posición. El Nissan Skyline GT-R y el Honda NSX se disputaron durante vueltas el liderazgo, en parte bastante influido por la propia posición de salida. El Toyota Supra obtuvo el segundo mejor tiempo por vuelta equipado con el motor 2JZ-GTE, y sorprende ver la baja posición del Mazda RX-7, con tiempos idénticos a los dos Toyota menos potentes de la batalla. Interesantes conclusiones a extraer de aquí.
Sí, el Supra tenía fama de “culón” y “pesado”, pero en este vídeo se demuestra lo rápido que era pese a su reputación. También se cimenta la fama de los NSX, Ferrari japoneses que pilotados con maestría son bisturíes implacables. Un profundo respeto igualmente al pilotaje de los japoneses, que en todo momento han mantenido la compostura de sus monturas, a pesar de lo inundado de la pista.
Vía DiarioMotor
