Hace algunos días les presentamos el modelo eléctrico más económico del mercado costarricense, el compacto Great Wall R1, que además se convirtió en el auto debut de la marca en el segmento de 100% eléctricos en nuestro país.
Hoy les tenemos nuestra primera toma de contacto con el Great Wall iQ, un SUV con mayores prestaciones y autonomía que su hermano menor.
Ambos modelos fueron creados bajo la nueva división eléctrica de Great Wall, denominada Ora, que fue presentada a finales del 2018 y que combina tecnología, seguridad, y eficiencia en los vehículos.
Este SUV de diseño futurista, con líneas simples y un aspecto más coupé en parte trasera, ofrece gran comodidad en su interior para cinco pasajeros, materiales variados y texturas, asientos traseros abatibles, y una cajuela de gran capacidad con compartimentos que permiten ordenar elementos como el cargador portátil, los triángulos y demás accesorios de viaje.
Con tracción delantera, el iQ ofrece una autonomía de 401 km en el ciclo NEDC, su motor es de 46 kW y su batería de iones de litio es de 43 kWh, logrando una potencia de 163 hp y 280 Nm, con una velocidad máxima de 150 km/h.
En esta ocasión, realizamos un recorrido aproximado de 140 km, visitando las montañas del cantón de Sarchí en Alajuela, un lugar con fuertes ascensos y descensos, donde pusimos a prueba su recuperación de energía prácticamente sin usar el freno. Llegamos a La Uruca con aproximadamente 240 kilómetros de autonomía.
Especialmente funcionales y atractivos fueron sus tres modos de conducción, el Eco para lugares congestionados en donde no se requiere mayor potencia o velocidad, el Normal, muy útil en la mayoría de recorridos con carreteras abiertas o bien tránsito moderado, y el Sport, un modo que definitivamente funciona excelente en autopistas con tránsito fluido, entrega velocidad en segundos, y mientras lo usamos no apreciamos un rebajo brusco del rendimiento de la batería. Al igual que el R1, cuenta con tres niveles de recuperación de energía.
Otra diferencia con respecto al R1 es que en su interior cuenta con palanca de cambios (en el R1 era un mando en forma redonda), además se pueden manejar algunas funciones a través de botones y no por la pantalla, por ejemplo el aire acondicionado.
Su recarga rápida de 5% a 80% se logra en 40 minutos, mientras que la recarga lenta en el hogar se completa en aproximadamente 10 horas hasta el 100% de la capacidad de su batería.
Cuenta con faros LED, botón de encendido, pantalla táctil, sunroof, cámara y sensores de retroceso, y un importante equipamiento en seguridad que incluye frenos ABS con EBD, sistema de control de tracción y estabilidad, asistente en pendientes, sistema de monitoreo de presión de neumáticos, seis airbags y anclajes para sillas de menores ISOFIX.
Disponible en colores blanco, rojo, azul y plomo, su precio de introducción es de $29.990, posteriormente su precio regular será de $32.990.
