El holandés Max Verstappen, de la escudería Red Bull, ganó este domingo el Gran Premio de Brasil de Fórmula 1 al imponerse en una emocionante carrera al francés Pierre Gasly y al británico Lewis Hamilton, quien acabó cediendo por sanción su tercer lugar al español Carlos Sainz Jr.
Verstappen, quien apunta maneras de futuro campeón y acarició el triunfo el año pasado en el circuito de Interlagos pero se quedó sin victoria tras un choque con el también francés Esteban Ocon, se redimió en esta ocasión tras arrancar desde la pole position.
“Fue muy divertido”, dijo Verstappen. “Es genial ganar la carrera. Sabíamos que teníamos velocidad a lo largo del fin de semana, así que estoy feliz de lograrlo esta vez”.
Fue la tercera victoria de la temporada para el holandés de 22 años, y llegó de forma dramática y después de que resistiera ataques de varios rivales.
“Lewis anduvo muy rápido, así que tuve que seguir presionando todo el tiempo. Se paró temprano, así que tuvimos que estar vivos en nuestras paradas en boxes y pude controlar la carrera con los neumáticos que llevaba”.
El alemán Sebastian Vettel y el monegasco Charles Le Clerc, compañeros en Ferrari, sufrieron un choque que les dejó fuera de combate, mientras que Gasly sorprendió al arrebatar el segundo puesto a Hamilton, seis veces campeón y relegado finalmente al séptimo lugar.
El británico venía de coronarse hace dos semanas en el GP Estados Unidos, en Austin, quedando a un título del récord de siete del alemán Michael Schumacher, pero en Interlagos ni siquiera pudo conformarse con subir al tercer cajón del podio.
Tras celebrar inicialmente, el piloto de Mercedes acabó bajándose poco después de concluir la carrera, cuando recibió una penalización de cinco segundos tras analizar el incidente los comisarios, quienes estimaron que Hamilton “fue el principal responsable” de un choque con el tailandés Alexander Albon, de Red Bull.
“Masivas disculpas a Albon. El hueco estaba allí, pero se cerró bastante rápido. Fue completamente mi culpa… Lo di todo. Conducí con mi corazón y tomé algunos riesgos”, concedió Hamilton.
La penalización lo retrasó para beneficio de Sainz Jr., de McLaren, quien remontó desde el último lugar en la parrilla al cuarto, luego de un problema mecánico en la calificación del sábado.
Un domingo de locura
La carrera resultó de lo más enloquecida, e incluso Vettel y Leclerc llegaron a tocarse en la vuelta 66, mientras el segundo intentaba adelantar al primero. Los dos pilotos de Ferrari se vieron obligados a abandonar, circunstancia que aprovechó Gasly, así como el incidente entre Hamilton y Albon.
Para el francés, que firmó su primer podio, la vigésima y penúltima prueba de 2019 ofreció un resultado inesperado tras una temporada complicada: Gasly saltó de Toro Rosso a Red Bull durante el invierno, pero fue relegado nuevamente a la filial durante el verano por falta de resultados, mientras que fue promocionado Albon.
Pero desde su regreso al equipo italiano, el normando parece haber recuperado su nivel. Para la otra Scuderia, es el segundo podio de la temporada después del conseguido por el ruso Daniil Kvyat, tercero en Alemania tras otra carrera excepcional.
“Seguro, nunca olvidaré esto. Es un momento tan emotivo y especial… Estos muchachos de Toro Rosso me han dado un gran auto”, celebró Gasly, quien corrió con un motor de Honda.
Verstappen lideraba la carrera con cuatro segundos de ventaja a falta de seis vueltas cuando Leclerc importunó a Vettel y ambos sufrieron pinchazos que les obligaron a abandonar. “¿Qué demonios está haciendo?”, gritó por radio interna Vettel.
Sainz Jr. terminó por delante de los dos Alfa Romeos de Kimi Raikkonen y Antonio Giovinazzi, el séptimo clasificado Daniel Ricciardo, de Renault, y Lando Norris en el segundo McLaren. El mexicano Sergio Pérez, de Racing Point, terminó noveno y Daniil Kvyat fue décimo en el segundo Toro Rosso.
El finlandés Valtteri Bottas, de Mercedes, acabó abandonando por falta de potencia del motor debido al consumo excesivo de aceite.
Por servicio de agencia AFP
