Después de ocho meses, 19 Grandes Premios y 5.795 kilómetros en carrera, este fin de semana terminará la temporada de Fórmula 1 de 2013
Después de ocho meses, 19 Grandes Premios y 5.795 kilómetros en carrera, este fin de semana terminará la temporada de Fórmula 1 de 2013. El Gran Premio de Brasil en Interlagos volverá a ser el último del año y esperemos que el fin de fiesta sea interesante y entretenida como las últimos que hemos visto en el circuito paulista donde Sebastian Vettel se coronó como campeón en la pasada temporada en una de las carreras más tensas de la historia reciente del Gran Circo.
En esta ocasión, los dos títulos no estarán en cuestión después de la exhibición que el alemán y su Red Bull RB9 están realizando en esta segunda fase de temporada. Además, la estadística se pone del lado de sus rivales, ya que Vettel tan sólo ha ganado una vez en la pista brasileña, donde Mark Webber y Felipe Massa han sido los únicos pilotos de la parrilla que han repetido victoria. El trazado paulista es tan peculiar que es uno de los pocos en los que Fernando Alonso no ha logrado ganar en su carrera deportiva.
Como es habitual, la última carrera del año nos pillará a la hora del café ya que tanto clasificación como carrera se celebrarán a las 17 horas. Antes, en la jornada del viernes veremos los primeros libres a las 13:00h y a las 17:00h. El sábado se terminará el tiempo para probaturas con los Libres 3 a las 14:00h, tres horas antes de que se decida la pelea por la pole. Un día más tarde, a las 17 horas, dará comienzo el GP de Brasil 2013. Si queréis tener la mejor información posible del Gran Premio, ya sabes cuál es nuestro consejo… ¡seguid la F1 con nosotros!
El Gran Premio de las despedidas
La carrera de este domingo en Interlagos estará teñida de nostalgia ya que dos de los pilotos clásicos de la parrilla disputarán la última carrera en sus actuales escuderías: el local Felipe Massa dejará Ferrari tras 139 Grandes Premios siendo el segundo piloto que más carreras ha disputado con los colores de la mítica escudería de Maranello mientras que Mark Webber cambiará su Red Bull de Fórmula 1 por un LMP1 de Porsche tras más de una década en el Gran Circo.
Ambos intentarán sacar su mejor cara en la carrera de este domingo tras un año gris. El australiano lo tendrá más fácil ya que su monoplaza se ha mostrado invencible en manos de Sebastian Vettel así que lo único que tendrá que conseguir Webber es batir a su compañero de equipo, algo de lo que se ha mostrado incapaz durante toda la temporada. Mientras, Felipe tendrá que lidiar con un monoplaza mucho más modesto ya que Ferrari parece cada vez más lejos de la cabeza en este final de temporada.
El equipo italiano necesita recuperar quince puntos a Mercedes si quiere terminar en segunda posición del campeonato de constructores y no perder 18 con respecto a Lotus si quiere asegurar, al menos, la tercera plaza. Esencial en esa pelea será la actuación de Heikki Kovalainen. El finlandés, sustituto de su compatriota Kimi Räikkönen en estas dos últimas carreras, se mostró consistente pero se quedó sin puntos en Austin por tener que cambiar el alerón delantero a media prueba. Esa lucha por equipos será el principal atractivo en términos deportivos del último Gran Premio del año.
En lo individual, las dos primeras posiciones ya están asignadas a Vettel y Alonso aunque el tercer puesto sigue abierto porque Lewis Hamilton aventaja en seis puntos a Mark Webber. Lejos de ellos aparece Nico Rosberg que, salvo victoria por su parte y hecatombe de sus rivales, será sexto a final de temporada por delante de Romain Grosjean, Felipe Massa y Jenson Button, cuyos puestos también parece seguros. Más abierta está la pelea por la décima posición entre Paul di Resta, Nico Hülkenberg y Sergio Pérez.
Los tres tendrán aún más motivos para brillar en Brasil ya que siguen siendo agentes libres para la próxima temporada después de una semana en la que se empezaron a fijar algunas piezas del puzzle del mercado de pilotos. El alemán de Sauber está destacando en las últimas carreras y tiene buenos recuerdos de Brasil, así que podría considerarse favorito para hacerse con un hueco entre los diez mejores y da la impresión de que eso le será más fácil que asegurarse una plaza en la parrilla de 2014. En ese ámbito, se espera que las reuniones y los paseos por el paddock sean muy importantes para decidir dónde estará cada uno el año que viene.
La de Interlagos también será la última carrera de Sergio Pérez con McLaren y Pastor Maldonado con Williams. Los dos cambiarán de colores de cara a la próxima temporada y confían en despedirse con un buen sabor de boca de sus equipos: el mexicano ya lo consiguió en Austin ante gran parte de sus aficionados mientras que el venezolano vio que el FW35 ha logrado recuperar el ritmo perdido como demostró Valtteri Bottas en la carrera estadounidense por lo que tendrá razones para ser optimista de cara a su despedida de la escudería de Grove, con la que debutó en Fórmula 1 hace ya tres temporadas.
Interlagos
La revirada pista de Interlagos está situada en una meseta en los alrededor de Sao Paulo y sus características han proporcionado grandes momentos para la historia, incluidos algunos muy especiales para la hinchada local, una de las más apasionadas de todo el calendario. A pesar de no haber un título en juego, la exigencia a los neumáticos y el inestable tiempo brasileño pueden depararnos una carrera para recordar durante todo el invierno hasta que los autos vuelvan a rodar en pretemporada.
En lo técnico, el trazado paulista es uno de los circuitos más cortos del Mundial con poco más de 4,3 kilómetros que los pilotos tendrán que recorrer 71 veces para ver la bandera a cuadros. La S de Senna es el punto más significativo del trazado que se adentra en curvas lentas en su segundo sector para desembocar en un último tercio en el que la potencia es clave para subir hacia la recta de meta. Prácticamente el único punto de adelantamiento es a final de recta aunque la FIA ha intentado multiplicar las opciones de adelantamiento implementando una segunda zona de DRS en la aproximación hacia la cuarta curva.
Al igual que en Austin, Pirelli equipará a los equipos con compuestos blando y duro. Además, el sello italiano permitirá a los equipos probar los neumáticos experimentales de 2014 durante las dos sesiones de entrenamientos libres del viernes para obtener datos de cara a su desarrollo. Como la última carrera se celebró en mojado, tenemos que irnos a 2012 para conocer un precedente válido en cuanto a paradas en boxes: entonces, los cinco primeros hicieron la carrera a tres paradas con neumáticos blando y medio.
Meteorología, apuestas y horarios
Seguramente, esta sea la sección más esperada de todo el previo porque la lluvia siempre suele ser protagonista en el Gran Premio de Brasil y en esta ocasión, parece que será así. Con temperaturas que irán de los 16º a los 22º durante el fin de semana, se esperan precipitaciones durante la jornada del viernes, que irán descendiendo con el transcurso del fin de semana aunque no es para nada descartable que el líquido elemento aparezca en carrera.
Vía F1 al día