Fernando Alonso será el gran ausente de la prueba australiana

Se acabaron los test, las conjeturas, los pronósticos casi a ciegas basados en los cronos de unos ensayos de pretemporada en los que algunos escondieron su potencial y cada equipo desarrolló su particular filosofía de trabajo dificultando cualquier comparación. Como dijo Fernando Alonso en su twitter: “En unos días empieza el campeonato y nos quedamos sin ciencia ficción”.

Llega el Gran Premio de Australia de F1, la prueba inaugural del Mundial, que dará un primer veredicto, se podrá comprobar si los Mercedes, como todos piensan, siguen teniendo una gran ventaja; si Ferrari ha ganado competitividad tras haber puesto el equipo patas arriba; si Red Bull será un peligro para las flechas de plata, y también si el McLaren de Fernando Alonso tendrá alguna oportunidad de luchar por al menos el podio o si sufrirá una nueva temporada en mitad del pelotón.

¿Donde está McLaren?

Fernando Alonso será el gran ausente de la prueba australiana, recuperándose de su accidente en los test de Barcelona. Pero lo que Kevin Magnussen –su sustituto– y Jenson Button –su compañero– consigan mostrará lo que cabe esperar del motor Honda, decepcionante durante la pretemporada, en la que acumuló tantos problemas que resultó imposible saber dónde estaba el chasis y dónde la respuesta real del motor.

Una primera radiografía de la parrilla que será todavía provisional. Magnussen y Button fueron 2º y 3º el pasado año en Melbourne tras Nico Rosberg y si bien el dominio Mercedes se confirmó, luego los McLaren se diluyeron y perdieron el tren hasta final de temporada.

Los expertos dicen que hay que esperar. Hacen falta más pruebas para tener un diagnóstico fiable. Al menos a que pasen los dos siguientes GP, Malasia y China. Posiblemente hasta llegar a Barcelona, que es el plazo que se han otorgado McLaren y Honda para recuperar el tiempo perdido.

La ‘marea azul’, que ha cerrado filas en torno a su campeón en estas difíciles semanas de rumores e incertidumbres tras el accidente, cruza los dedos para que el motor homologado por Honda sea de mínimamente fiable para que dé una oportunidad a Alonso, que por eso dejó atrás su etapa Ferrari.

El debut de Sainz

En Australia la afición española tendrá un polo de atracción muy especial, el debut de Carlos Sainz en la F1. Un estreno nada fácil si se tiene en cuenta el torrente de alabanzas con destino en el holandés Max Verstappen, el más joven piloto de la historia de la F1, que aún no ha hecho los 18.

Sainz no es mucho mayor (20 años) y luchará por asentarse en el difícil mundo de la F1. Una tarea nada sencilla pero que se espera que el joven madrileño la complete con éxito.

En la pista urbana de Melbourne, donde siempre hay sorpresas, se intentará adivinar si Williams sigue siendo el segundo equipo o si el cambio a motor Mercedes ha dado alas a Lotus. También si Sauber ha conseguido el milagro de pasar de farolillo rojo a luchar en el seno del segundo pelotón

Vía: Mundo Deportivo