Si ayer eran Maverick Viñales y Valentino Rossi los que descubrían cómo iban a ser sus motos para este 2017, esta mañana les ha tocado a Jorge Lorenzo y Andrea Dovizioso hacer lo mismo en Bolonia. Y es que el auditorio de Ducati ha sido el lugar elegido para que los dos pilotos oficiales de esta temporada presumieran sobre sus dos Desmosedici GP17.
El evento ha supuesto la presentación oficial de Lorenzo como piloto de la fábrica italiana, aunque no ha sido la primera vez en la que lo hemos visto vestido rojo, pues ayer se diera un baño de masas en la fábrica de Ducati. El piloto español solo ha tenido palabras de elogio para su nueva marca, de la cual ha resaltado que es “un orgullo” formar parte.
La decoración de la moto con la que competirán este año en el mundial de MotoGP es muy similar a la de años anteriores, con el rojo como color dominante y el blanco como segundo, por lo que las Ducati seguirán manteniendo sus principales características estéticas. Eso sí, en cuanto a la mecánica, durante la presentación el propio Gigi Dall’Igna reconoció que la GP17 todavía no está a punto y que no se verá una versión definitiva hasta Qatar, después de que hayan realizado diferentes pruebas en los test de pretemporada.
Tal y como Claudio Domenicali, Consejero Delegado de Ducati, ha reconocido durante la presentación, el objetivo del team de cara a esta temporada es conseguir el título de MotoGP. Y aunque no lo haya reconocido de forma abierta, la apuesta de la marca italiana se llama Jorge Lorenzo.
