Sebastien Ogier arrancará la última jornada del Neste Oil Rallye de Finlandia con una renta de 38 segundos al frente de la general tras la disputa de los nueve tramos cronometrados celebrados hoy
El francés comenzó el día en segunda posición con su Polo R WRC a 5.2 segundos de Thierry Neuville, y se situó en cabeza de un grupo de siete pilotos separados por tan solo 23 segundos.
La igualdad se mantuvo toda la mañana, con los scratch para Ogier, Mikko Hirvonen y Mads Ostberg, un trío de pilotos que finalizó el bucle matinal separado por 11 segundos.
Pero todo cambió por la tarde, cuando Ogier aumentó su ritmo en unos tramos lleno de roderas en las segundas pasadas y donde todos sus rivales tuvieron problemas.
“Ha sido una tarde perfecta”, reconoció Ogier. “Estoy muy contento con el ritmo del auto. Hemos sido capaces de atacar y de tener velocidad. Pero esto no ha terminado todavía, mañana será un día muy largo”.
El líder de anoche, Neuville, se mantuvo cerca del liderato hasta que en el kilómetro 13 del tramo de Mokkipera (TC13), cuando perdió más de 30 segundos al pinchar su neumático delantero izquierdo.
Otros problemas con las ruedas siguieron en el TC14. “A pesar del pinchazo el día fue bueno”, dijo el belga. “Ha sido una pena, pero esto son los rallies. No pincho mucho, pero esta vez ha pasado”.
Ostberg es tercero a menos de un segundo de Neuville. El noruego estaba en la pelea con Ogier hasta el TC15, cuando golpeó una roca que destrozó la rueda delantera izquierda de su Fiesta lo que le hizo perder 45 segundos.
“Todavía estamos aquí y estoy feliz por ello”, dijo. “Fue una gran pena, pero los pinchazos siempre están ahí. No hay nada que podamos hacer. Bueno, sabemos que tenemos velocidad para superar a Thierry mañana, eso es lo que queremos”.
Hirvonen es cuarto a poco más de 1 minuto del líder y fue el primer en caer de la pelea por el triunfo. El finlandés tuvo una salida de pista en el TC11 lo que le hizo perder 20 segundos y pinchar dos ruedas y la suspensión trasera de su DS3 WRC.
El ganador aquí en 2009, Hirvonen está deseando que las cosas se pongan de su parte en los ocho tramos restantes. “Aún queda un largo y rápido día por delante. Mi plan es simple – ir pie a tabla y tratar de alcanzar a los chicos de delante”, dijo.
El sustituto en Citroën Kris Meeke es quinto en su debut con un DS3 WRC. El británico se vio retrasado en la décima especial cuando alcanzó – pero no logró adelantar – al dañado Ford de Evgeny Novikov, a pesar de lo cual logró ser segundo scratch en dos especiales.
“He tenido un montón de malos días en el WRC en estos últimos años, pero este es el mejor mal día que he tenido jamás”, bromeó. “Es tan, tan grato estar con un buen equipo y un buen auto – siempre quise una oportunidad como esta. Aún queda mucho por delante y estamos mejorando paso a paso”.
Jarkko Nikara es sexto en un Mini JCW preparado por Prodrive, siendo el mejor piloto privado.
Andreas Mikkelsen era séptimo hasta el penúltimo tramo, cuando tuvo que retirarse con su Volkswagen Polo R tras la meta, después de que el auto perdiera su rueda trasera izquierda y la suspensión.
En su lugar ese puesto lo ocupa el piloto oficial de Citroën Dani Sordo, que sufrió durante la mayor parte de la jornada. “Es difícil saber por qué no he tenido buenas sensaciones, pero seguiremos apretando”, comentó.
Jari Ketomaa es octavo, con Evgeny Novikov noveno tras su accidente en la décima especial. Tras sufrir problemas de tracción en la primera etapa y afrontar los tramos de esta mañana sólo con motricidad en el eje delantero, P-G Andersson tuvo una mejor tarde para así devolver su Fiesta RS a las asistencias en 15ª posición.
Jari-Matti Latvala volvió a salir hoy bajo reglamento Rally 2 tras su abandono en la primera etapa. El piloto de Volkswagen tuvo un buen día pero está a más de veinte minutos de los líderes, siendo el último WRC.
El checo del Ford Fiesta RS Martin Prokop iba noveno hasta que tuvo que retirarse tras la undécima especial por problemas de sobrecalentamiento en su motor. Se unió por tanto a Hänninen en la lista de abandonos del viernes, pues el finlandés tuvo que parar en el tramo nueve por una rotura de la suspensión.