Un aficionado norteamericano adquirió una Kawasaki H2R, catalogada como la moto de producción más veloz del planeta y creada específicamente para el circuito, y tras una serie de modificaciones la adaptó para circular legalmente por vía publica. Con esa modificación se convirtió en la única en el mundo que se puede usar en el uso diario, pues bien, ahora esa motocicleta está en venta.
Cliff Secord fue el encargado de llevar tal idea a la realidad, encargó a la marca el material necesario para empezar a trabajar lo más antes posible. Con modificaciones esenciales como el ventilador para el motor, radiador, así como montar la electrónica que controle las luces, el proyecto comenzaba a tomar forma.
Con una impresora 3D, Secord fabricó la carcasa frontal en fibra de carbono, ahí montó toda la iluminación requerida con tecnología LED. Para adaptar la matrícula, optó por un portaplacas Yoshimura modificado para este modelo en particular.
La Kawasaki Ninja H2R utiliza un motor de 998 cc supercargado que genera una potencia de 326 caballos con Ram Air a 14,000 RPM y 121 libras-pie, su peso es de 216 kilogramos, todo esto traducido en una relación peso/potencia de 0,69 Kg/Hp. Incluye todas las tecnologías de ayuda a la conducción.
Luego de semanas trabajando, logró inscribirla para circular por las calles de Ohio como cualquier otra motocicleta, pero en poco tiempo de rodar con ella Cliff tomó la decisión de ponerla en venta para comprar la versión más reciente de este poderoso modelo y repetir la proeza. Aun no se conoce el precio, pero se cree que la tarifa ronda los 65.000 euros, tomando en cuenta que la versión original cuesta 50.000 euros.
