Un motor que funciona con amoníaco líquido, esta es la apuesta de la marca japonesa Toyota en colaboración con el gigante GAC.
Se trata de un propulsor que fue mostrado por primera vez en la exhibición anual del fabricante chino. En concreto es un 2.0 litros con 161 hp y que, según los creadores, emite un 90% menos de dióxido de carbono que uno de gasolina.
Si bien no es la primera vez que se trabaja en un motor de este tipo, ya que se ha explorado como combustible alternativo en camiones y transporte marítimo.
Hasta el momento, los fabricantes lo promocionan como prototipo y alternativa real a los combustibles tradicionales.
En lo próximos meses, Toyota líder del proyecto, estaría dado más detalles de este llamativo propulsor.