Una carrera de aceleración contra BMW X3 M, dejó como resultado un McLaren 720S en pedazos y con honor por el suelo.
Si bien el 720S con sus 720 hp contra los 510 del SUV lo ponían adelante, la motricidad superior del BMW gracias a la tracción total y una superficie un tanto resbaladiza hicieron que el X3 M pudiera ganar.
Al parecer, el conductor del McLaren pareció calcular muy mal dónde estaban los límites de la pista y no frenó a tiempo antes de estrellarse contra una fila de barreras de paja.
Para fortuna de los integrantes de la carrera, nadie salió herido, solo pérdidas materiales.