Un minuto de pura sinfonía motor
Hay autos que cuando son grabados en vídeo, necesitan “mucha música” para atenuar el traqueteo de sus motores. Si hay que seducir al cliente, lo último que se puede hacer es evocar a John Deere o a una Vespa, pero afortunadamente todavía quedan monstruos que no requieren de acompañamiento adicional alguno, porque la simple y al mismo tiempo elaborada armonía de sus combustiones y sonidos de inducción y escape provocan el éxtasis de los espectadores.