En plena movilidad eléctrica, los motores V8 tienden a perder protagonismo en una industria donde la movilidad ecológica y las normas de emociones son los que rigen la dinámica del mercado.
En este contexto, el CEO de Mercedes-AMG, Michael Schiebe, expresó recientemente en una entrevista a Autocar que ese motor V8 aún no tiene una fecha de caducidad.
“El objetivo principal [de AMG] es satisfacer las necesidades de los clientes. Todavía vemos que hay muchos clientes que aman nuestros motores V8 y nuestros motores de cuatro cilindros de alto rendimiento”, expresó.
La idea de la marca es alargar sus propulsores a combustión hasta donde sea posible, esto teniendo en cuenta lo que su público meta apunta en cuanto a demanda y gustos.