Ken Block es ya hoy en día uno de los pilotos más famosos del planeta. Hace años, no obstante, era un desconocido que trataba de hacerse un hueco en los rallyes estadounidenses. No obstante, cuando se sacó de la manga su peculiar concepto de “gymkhana” automovilística, su popularidad se disparó. Aún recuerdo la primera Gymkhana, con un presupuesto muy moderado, pero con una brillante ejecución. Supo canalizar la popularidad de sus vídeos en YouTube con una brillante campaña de márketing, e incluso la creación de “Hoonigan”, su peculiar marca de ropa y merchandising. Pero aquí hemos venido a hablar de autos.
Dejando a un lado las dos primeras gymkhanas, los protagonistas de siete de las nueve gymkhanas han sido vehículos Ford. Basados en vehículos de producción, son máquinas de altísimas prestaciones, con mecánicas muy modificadas y cientos – incluso miles – de caballos. Queremos hacer un repaso a estos Ford tan especiales, coprotagonistas de un festín visual que acumula ya más de 300 millones de visualizaciones en Internet.
Gymkhana 3: un Ford Fiesta de 650 CV
Desarrollado por Olsbergs Motorsport Evolution, Ken Block abandonó su Subaru Impreza WRX STI y lo reemplazó por un bestial Ford Fiesta, creado con el único propósito de ser increíblemente rápido. Su motor era un 2.0 turbo de cuatro cilindros, capaz de arrojar 850 CV de potencia, pero limitado a 650 CV para poder controlar su potencia. Toda la potencia pasaba a las cuatro ruedas mediante un sistema de tracción total permanente, enganchado a una caja de cambios secuencial de seis relaciones. Aún recordamos su aparición estelar en la Gymkhana 3, decorado con llantas de color verde y unos vinilos que imitaban el goteo de una pintura de color negro.
Gymkhanas 4 y 5: Ford Fiesta H.F.H.V.
Hybrid Function Hoon Vehicle, un “híbrido”, aunque sólo en función. Basado en el Ford Fiesta RS WRC, fue estrenado en 2011 y por primera vez, combinaba en un único vehículo la capacidad de competir en Rallycross y en el WRC, con la producción de las gymkhanas. Empleaba un motor turbo de 2,0 litros desarrollado por Ford Racing, capaz de arrojar hasta 600 CV de potencia y 900 Nm de par motor máximo. Una simple brida para su turbo podía rebajar su potencia para un uso en otras competiciones. La caja de cambios secuencial, su suspensión WRC ajustable y su sistema de tracción total sí eran comunes a todas las funciones.
Cuesta olvidar el sendero de destrucción y espectaculares derrapes de estas dos Gymkhana, acontecidas en Hollywood y San Francisco. Quizá las dos Gymkhana más recordadas de las nueve producciones de Ken Block.
Gymkhanas 6 y 8: Ford Fiesta ST RX43
Tras usar un Ford Fiesta basado en el mundo de los rallyes, la sexta Gymkhana del corredor estadounidense se trasladó al mundo del rallycross, una brutal disciplina en la que varios autos se enfrentan en una pista de superficie mixta. Un deporte de contacto en el que el Fiesta ST RX43 competía con una propuesta de 650 CV y la capacidad de acelerar hasta los 100 km/h en menos de dos segundos. Este Ford Fiesta ST fue después usado por el piloto en el mundial de Rallycross, tras su abandono de los rallyes tradicionales. La Gymkhana 6 transcurrió en un parking repleto de obstáculos, siendo mucho más memorable su octava entrega.
En esta octava entrega el señor Block se fue a Dubai, donde protagonizó todo tipo de peripecias sobre ruedas, implicando a la policía de Dubai y un jumbo de cuatro reactores por el camino. Ver para creer.
Gymkhana 7: Ford Mustang RTR Hoonicorn
Quizá el auto más espectacular de Ken Block, con diferencia. Lo que nació como un Ford Mustang del año 1965 pronto se convirtió en un Frankenstein equipado con un motor V8 atmosférico, un Roush Yates de 857 CV de potencia, de nuevo enviada a las cuatro ruedas del auto. Fabricado por RTR y ASD Motorsport, el “Hoonicorn” está inspirado en un Hot Wheels, y del Mustang clásico apenas quedan algunos paneles de la carrocería. Es realmente una bestia ad-hoc, con un nuevo chasis, un nuevo kit de carrocería y unas prestaciones de otro mundo. Fue la estrella de Gymkhana 7, la favorita de un servidor, que tuvo como escenario privilegiado a la ciudad de Los Angeles.
Parece que a Ken Block su Hoonicorn le ha sabido a poco. Así que de cara a 2017 lo ha evolucionado. Será el protagonista de un ascenso a Pikes Peak, y lo hará con 1.400 CV de potencia, procedentes de la doble turboalimentación de su motor de ocho cilindros. No podemos esperar a verlo en acción.
Gymkhana 9: Ford Focus RS RX
La última Gymkhana de Ken Block se ha estrenado hace apenas dos meses, y su protagonista ha sido la versión Rallycross del Ford Focus RS. Ambientada en un Detroit de aires post-apocalípticos, el Ford Focus RS RX brilla por sus prestaciones: su motor turbo de 660 CV – y 895 Nm de par máximo – le permite acelerar hasta los 100 km/h en 1,8 segundos, más rápido que un Fórmula 1. Su kit de carrocería incrementa su ancho en bastantes centímetros, separándolo de forma notable del auto de producción. Es el mismo auto que el piloto usará en el mundial de Rallycross, buque insignia de la marca del óvalo en competición junto al Ford GT.