Lamborghini se suma al grupo de los superdeportivos híbridos con el Asterion, que cuenta con un sistema enchufable
Los tiempos modernos son para todos por igual e incluso a fabricantes tan especiales como Lamborghini les obliga a evolucionar. Los superdeportivos del siglo XXI tienen que ser también sostenibles y la respuesta que llega desde Sant’Agata a esta necesidad se llama Lamborghini Asterion LPI 910-4.
El Asterion recurre por primera vez en la marca a una motorización híbrida enchufable para conseguir, además de los 910 caballos de potencia total que figuran en su nomenclatura, unas emisiones medias de 98 gr/km. y un consumo promedio de 4,12 litros.
Interior del prototipo
El Lamborghini Asterion combina un propulsor de diez cilindros en V (el 5.2 FSI atmosférico de 610 caballos) con tres unidades eléctricas, dos de ellas para el eje delantero, que suman otros 300 para conseguir esos 910 caballos totales. Como es tradición en la mayoría de los modelos de la casa, adopta un sistema de tracción integral que se activa bajo el modo híbrido, cuando todos los motores trabajan en la propulsión. En el modo eléctrico sólo lo hacen los motores eléctricos delanteros.
La autonomía eléctrica máxima es de 50 kilómetros, tiempo en el que rodará sin emitir contaminación alguna… ni tampoco sonido, como como se ha comprobado durante la presentación.
Pero lo que no cambia es su tremendo potencial dinámico: 320 km/h de velocidad máxima (en modo eléctrico llega a los 125 km/h), tres segundos para el 0-100. Todo ello pese a que el nuevo tren de potencia del Asterion ha sumado 250 kilos al peso total, si bien su construcción ligera en en fibra de carbono permite asumir ese ‘lastre’ sin comprometer las prestaciones.
El nombre de Asterion se corresponde con el nombre en griego del minotauro, una figura que mezcla de hombre y de toro que calza a la perfección con la identidad híbrida del nuevo bólido italiano.
Por: marcamotor
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