Audi confirmó de manera oficial que de hoy en adelante sus motores a combustión, sean TFSI o TDI, no se construirán como nuevos. Los existentes pasarán por las actualizaciones necesarias, hasta que sean reemplazados por propulsores eléctricos.
Este paso trascendental por parte del conglomerado llega de la mano en el cumplimiento de los objetivos de electrificación, con los cuales se busca responder a las leyes que controlan las emisiones de gases, dice la marca.
La idea es que para 2035 sus modelos y fábricas sean carbono neutro para de esta forma, cumplir con los estándares medioambientales y erradicar costes de producción.
Sin embargo, con las actualizaciones requeridas, los motores vigentes podrán mantenerse por al menos cinco años más, incluyendo como opción el uso de combustibles sintéticos.
Actualmente, la marca ofrece en su portafolio de productos modelos totalmente eléctricos y otros híbridos ligeros el Audi A3 Sportback e-tron, Audi Q7 e-tron y el recién presentado Audi e-tron GT.