En Orlando, Estados Unidos, la empresa ECD Automotive Design se encarga de construir Land Rover Defender clásicos adaptados al siglo XXI dio a conocer su nueva creación, se trata de un Land Rover Defender con motor y baterías de Tesla.
La estética clásica y los detalles modernos son los grandes protagonistas, en cuanto a su tecnología oculta deriva de un Model S con 600 caballos.
Está alimentado por dos paquetes de baterías, una instalada bajo el capó, y la otra en la parte trasera para nivelar el conjunto. Todo el equipo cuenta con una capacidad de 100 kWh. En teoría debería recorrer casi 400 kilómetros.
El precio ronda los 200 mil dólares de base y la compañía ya acumula un pedido que supera las 400 unidades. Cada cliente tiene que esperar alrededor de 14 meses para completar el pedido.
