La marca Continental lleva varios años desarrollando un propulsor eléctrico del tamaño de un eje, concretamente se trata de la tercera generación el cual se comenzará a producir en serie en China a finales de este año y estará disponible en los principales mercados del mundo.
El motor sobresale por integrar el sistema de un solo eje de transmisión, es por eso que es más ligero y compacto que los actuales. Dicha configuración se puede montar en diferentes tipos de automóviles tanto de marcas chinas como europeas.
Según el proveedor, es la primera “unidad motor-transmisión integrada totalmente en el eje para la producción en masa”.
Está fabricado por la división Powertrain de Continental y combina dentro de una misma carcasa varios componentes que forman un tren de potencia electrificado con refrigeración líquida. El peso del conjunto queda por debajo de los 80 kilos.
Para Car and Driver, el reto ha sido conseguir la sincronización de todos los componentes individuales para que funcionen de la mejor forma (motor eléctrico, unidad electrónica de potencia y transmisión). Así mismo, incluye freno de mano integrado en la transmisión.
Según Continental, el propulsor ofrece una experiencia de conducción “excepcional” a un coste ajustado. Está disponible con dos cifras de potencia, 160 ó 200 caballos de fuerza y un par máximo de 310 Nm.
