Así llega al Dakar 2016 el equipo Toyota con De Villiers, Al-Rajhi y Poulter como pilotos oficiales
Apuesta fuerte. Un auto mejorado, una dupla de pilotos ganadores y una estructura que será capaz de competir con los equipos más grandes. El equipo Toyota Gazoo Racing South Africa tiene mucho que decir en el Dakar 2016. Tres podios en los últimos cuatro años quieren ser refrendados con una victoria.
El auto
Y mimbres no le faltarán para ello porque han evolucionado el Toyota Hilux y con recorrido que les favorece. Las pistas rápidas y duras le vienen mejor al Hilux, 4×4, y será ahí donde podrá sacar todo su potencial. Y es que el motor de gasolina les hace perder mucho tiempo sobre arena pero, por suerte para el equipo sudafricano, habrá menos terreno blando que nunca.
“Mejoramos también las suspensiones y cambiamos levemente el chasis. Hay novedades en casi todo el vehículo”, explica Giniel De Villiers. El prototipo sufrió evoluciones y test sobre la arena del Desierto del Kalahari. Compitieron entre los mejores en el Rally de Marruecos y Egipto, con mucha arena, con mucho desierto, y eso aporta esperanzas. Además, hombres como Vasilyev, Ten Brinke y Varela, con otros preparadores pero el mismo vehículo, han obtenido grandes resultados. Esperanzas para el Hilux.
Los pilotos
En cuanto a los pilotos, Giniel De Villiers seguirá siendo el líder del equipo, de un equipo formado por él mismo en torno a la marca Toyota. Además, han completado el equipo con Yazeed Al-Rajhi, que destacó en el último Dakar, y el sudafricano Leeroy Poulter.
Giniel De Villiers, aires de grandeza
Tras su victoria en el Dakar 2009, el sudafricano se ha consolidado como un de los pilotos más regulares de la prueba. Bien es cierto que no ha vuelto a asomarse por el primer escalón pero siempre ha estado luchando entre los mejores, gracias a su experiencia y fiabilidad. Raro es ver a De Villiers con problemas de accidentes o de mecánica, la conserva muy bien. Doce ediciones y ni un solo abandono lo demuestran. Y ojo, porque no con resultados cualquiera. No ha bajado nunca del séptimo puesto de la general y suma trece victorias de etapa.
Como decimos, un piloto muy fiable y estable. Lo demostró el año pasado en un Dakar muy duro pero fue el único capaz de plantar cara a Nasser Al-Attiyah en ciertas fases. Esta temporada, con 43 años, solo ha corrido una prueba del Mundial Cross Country, acabando cuarto en el Rally de Marruecos. Su copiloto, Dirk Von Zitzewitz, acumula catorce apariciones dakarianas. Se inició a finales de los 90, acabando en el top 10 en la categoría de motos en dos ocasiones, antes de iniciar su carrera como navegante de diferentes pilotos. Experiencia y dotes de navegación no le faltan.
Yazeed Al-Rajhi, aparición estelar
Este piloto árabe se ha destapado como uno de los hombres más rápidos del Dakar. Lo hizo el pasado año, antes de abandonar, cuando marchaba tercero, con una etapa ganada. Una rapidez que deberá canalizar y dosificar, convertir en ritmo. Un ritmo que le puede llevar a la gloria. Ojo, no sería nada desdeñable ver al saudí peleando por la victoria con los más grandes. Se presenta como uno de los animadores de la prueba a sus 34 años.
Este año ha completado un buen Mundial de Cross Country. Tercero en la general, quedó segundo en el Rally de los Faraones, tercero en Marruecos y cuarto en Abu Dhabi. Unos resultados muy buenos que le catapultan al Dakar con mucha energía. Además, formando parte de un equipo oficial, con más medios que la pequeña estructura con la que corrió el pasado año. Su copiloto, Timmo Gottschalk, tiene experiencia con grandes pilotos como Carlos Sainz o Nasser Al-Attiyah, con quien ganó una edición. Un navegante de garantía que ayudará a canalizar esa energía que desprende Al-Rajhi.
Leeroy Poulter, sin presión y con confianza
A sus 34 años, Poulter a pasado por el motocross, por el karting… y ahora pretende destacar en el Dakar. El sudafricano afrontará su tercera edición con ganas de seguir mejorando. Acabó en el puesto 33 el primer año y fue decimosexto en 2015, acabando la prueba en gran forma. Cuarto y segundo en las etapas 10 y 13 que le aportan una gran dosis moral.
Su misión será la de apoyar tanto a De Villiers como a Al-Rajhi e intentar, por qué no, colarse en el top 10 de la prueba. Su copiloto será Robert Howie, con cuatro años ya de experiencia en el Dakar. Fue décimo en 2012.
Vía MotoryRacing