En el 2016 se confirmó una noticia que muchos no querían escuchar, el fin de la producción del Land Rover Defender tal y como lo conocíamos desde 1983.
Para los puristas, atrás quedaba la herencia del Serie I de 1948, los posteriores series II y III, y el mismo Defender, el legado de un 4×4 rudo, para trabajo, o para enfrentar los caminos más difíciles. Pero bueno, también era tiempo de acoplarlo a las necesidades de nuestro tiempo, a las exigencias medio ambientales, a la tecnología.
Este año, Land Rover presentó el nuevo Defender, un vehículo que evolucionó por completo, convirtiéndose en un SUV con suspensión neumática electrónica, dejando atrás el chasis de largueros y los ejes rígidos, pero que rinde tributo a su espíritu offroad, con el que el conductor se puede sentir cómodo en la ciudad, o bien en la arena de la playa, en los caminos de lastre, en el barro o las piedras, que siempre son exigentes.
En este nuevo Defender se buscó un equilibrio en su diseño. Sus formas rectangulares con las secciones delantera y trasera completamente verticales, su puerta trasera de apertura lateral con la rueda instalada, las ventanas alpinas y muchos detalles en el interior son fácilmente reconocibles del modelo anterior, sin embargo su diseño termina siendo una mezcla con un SUV moderno, algo con lo que los puristas no estuvieron muy encantados.
Las medidas del nuevo Defender son 5 metros de largo, 2.1 de ancho, 2 de alto, la distancia entre ejes es de 3 metros y la altura libre al suelo es de 29 cm, una de las mejores del segmento offroad. También son muy competitivos en el segmento sus ángulos de entrada de 38 grados, ventral de 28, y 40 de salida. El espacio de carga detrás de la segunda fila es de hasta 1075 litros y hasta 2380 litros cuando la segunda fila está plegada.
A nuestro país, arribaron en su versión 110, es decir cinco puertas con configuraciones de cinco, seis, o 5+2 plazas, la versión 90 de dos puertas llegará en el 2021.
Las novedades comienzan con las motorizaciones, con los propulsores Ingenium gasolina de seis cilindros en línea con 2.0 y 3.0 litros, con 300 o 400 caballos de potencia, con 400 Nm y 550 Nm respectivamente, asociados a la transmisión automática de ocho velocidades y tracción AWD permanente.
En el 3.0, que fue la unidad que pudimos probar, destaca la tecnología micro híbrida MHEV, la cual almacena energía tanto del frenado regenerativo como de la desaceleración en una batería de 48 voltios, la cual suple al supercargador eléctrico, con este sistema se incrementaron 142 Nm para llegar a los 550.
Para las versiones S y SE (que son las que actualmente hay en Costa Rica) el bloqueo del diferencial es central, sin embargo las versiones de más alta gama cuentan con bloqueo de diferencial trasero.
En su interior es donde se nota más el contraste con lo moderno. Sus materiales de gran calidad son pensados en la durabilidad, por eso encontramos un piso plano que puede ser lavable, tapicería en cuero con inserciones de tela resistente en las zonas donde más se tiende a desgastar, en el dash todos son materiales son suaves al tacto con inserciones de tela lavable, el caucho es anti deslizante, tenemos tablero digital y pantallas, pero al mismo tiempo tiene agarraderas en las plazas laterales y en la parte frontal, tornillería que evoca la robustez de sus antecesores, y muchos otros detalles.
Pero un punto en lo impresiona es en su tecnología y todos los sistemas que ayudan a que el conductor le “saque el jugo” a sus prestaciones todoterreno.
El sistema Terrain Response 2, incorpora diferentes modos según la superficie, uno de ellos, el de Vadeo, que prepara al vehículo para esa situación levantando la suspensión al máximo, y activando unas aletas activas en la zona inferior del motor para proteger componentes del vehículo. Si gusta, el conductor puede configurar a su gusto el Terrain Response, en el que se ajusta individualmente el diferencial, tren de poder, dirección, y control de tracción.
La tecnología Clear Sight Ground View ayuda a los conductores a observar lo que sucede en la trazada de las ruedas, esto se muestra en la pantalla táctil central.
Los invitamos a conocer todos los detalles en nuestra prueba de manejo OFF ROAD:
*Los datos de consumo correctos son de 9.6 litros/100 km en la versión 3.0, y 9.8 litros/100 km en la versión 2.0.