General Motors se hace con el trono de ventas mundiales de automóviles con unas ventas finales de 4,53 millones de vehículos
Durante los último años, Toyota era el primer fabricante mundial de automóviles por volumen. General Motors estaba cada vez más rezagada, y su bancarrota la hundió aún más en el ranking, mientras poco a poco, Volkswagen trepaba en volumen, sin prisa pero sin pausa. Hoy por hoy, GM se ha recuperado de su proceso de quiebra, goza de ventas más que saneadas y Volkswagen no deja de cosechar ventas récord para todas sus marcas – incluso Seat ha reducido sus pérdidas – gracias a una tremenda ofensiva de producto.
El desastre venía para Toyota en marzo, cuando muchas de sus fábricas fueron afectadas de manera directa o indirecta por el terrible terremoto – y consiguiente tsunami –. Las cifras de ventas durante los seis primeros meses de 2011 atestiguan el descalabro causado por la falta de suministro a bastantes plantas de producción de Toyota en Japón, donde se producen en exclusiva todos los sistemas híbridos, por poner un ejemplo bastante gráfico.
Las ventas de Toyota han sido de 3,71 millones de unidades durante la primera mitad de 2011, incluyendo la división de camiones Hino y Lexus. Por su parte, el Grupo Volkswagen en todo su conjunto ha colocado un total de 4,13 millones de unidades en el mercado, mientras que General Motors se hace con el trono de ventas mundiales de automóviles con unas ventas finales de 4,53 millones de vehículos. La situación en Japón está mejorando, pero hará falta tiempo para que Toyota vuelva a sus anteriores niveles de producción.
Algunos analistas japoneses advierten que aunque Toyota se recuperase totalmente del impacto de inmediato, sus ventas de 2011 estarían por detrás de las de Volkswagen con toda seguridad. Mientras tanto, se sigue haciendo leña del árbol caído, con espectaculares aumentos de ventas por parte de Kia y Hyundai, que parece tener las miras puestas en arrebatar el tercer puesto a Toyota, gracias a unos productos cada vez más logrados y una cadena de suministro funcionando a toda vela.