Un todoterreno auténtico llega desde China para poner en apuros a los 4×4 americanos, es decir al Bronco y Wrangler. Se trata del Wey Tank 300, un modelo con líneas muy cuadradas hecho para competir en el segmento off-road.
Está construido sobre un chasis compuesto por largueros y travesaños proveniente de otro 4×4 asiático denominado Havel H9.
En el tema mecánico equipa un motor turbo, cuatro cilindros 2.0 litros que desarrolla 225 caballos de fuerza así como un propulsor turbodiésel con 190.
Equipa una caja de cambios automática con 9 velocidades asociada a un sistema de tracción a las cuatro ruedas con reductora. El diferencial delantero, central y trasero con bloqueo complementan el conjunto.
En el apartado estético recuerda de forma contundente a los 4×4 americanos con líneas cuadradas y ángulos de ataques bastante sobresalientes.
En el interior recuerda mucho al del Clase G de Mercedes, ya que el diseño es muy parecido al del salpicadero que utilizan los modelos actuales de la marca alemana.
Según Car and Driver, el fabricante chino introduciría el modelo a finales del presente año en su país sin planes de comercializarlo en otros mercados.