El equipo Hyundai se quedo sin opciones en Monte Carlo tras el abandono forzado de sus dos pilotos
El subcampeón del mundo de 2013, estaba realizando su debut en competición con el Hyundai i20 WRC en el Monte Carlo.
Sin embargo, su comienzo prometedor llegó rápidamente a su fin en el kilómetro 6 del primer tramo, trazado que se encontraba cubierto de nieve. El belga había sido 4.5 segundos más rápido que Ogier en el primer split de la especial, pero poco después se ha salido de la carretera.
El piloto de Hyundai estaba montando neumáticos Michelin de compuesto súper blando, al igual que la mayoría de sus rivales. El belga y su copiloto, Nicolas Gilsoul, están bien, pero muy decepcionados por su temprano abandono.
Este ha significado su cuarto abandono consecutivo en la primera jornada del Rallye Monte Carlo.
“Es muy simple. Íbamos demasiado rápidos en una curva y perdimos la parte delantera del coche. Trompeamos y nos rompimos la parte trasera”, ha comentado el belga.
El director del equipo Hyundai Motorsport, Alain Penasse, ha comentado a WRC.com: “Estamos decepcionados porque habíamos acordado de tener un buen inicio porque sabíamos que las condiciones eran muy duras”.
“Si comparamos el split con el de Ogier, Thierry había sido 4.5 segundos más rápido, es una gran diferencia. Creo que tal vez ha comenzado atacando demasiado y no ha considerado del todo bien las condiciones delicadas que habían en ese momento en la pista”.
Neuville no fue el único piloto al que le ha sorprendido la nieve en el primer tramo. El Campeón del Mundo, Sébastien Ogier, ha perdido tiempo después de haber tocado un muro en la primera curva.
Dani Sordo tambien abandona el Rally de Montecarlo.
Tras su buen arranque en la primera etapa, del que salió situado en tercera posición, el español se ha visto obligado al abandono por un problema con la batería de su nuevo Hyundai.
Sordo se encontraba en disputa de la segunda plaza, que en ese momento estaba en manos de Kris Meeke. Pero en el enlace entre el cuarto y el quinto tramo, su nuevo vehículo se paraba con problemas de batería. Por más que él y Marc Martí lo intentaron, en comunicación con el equipo, no consiguieron solucionar el problema, y se vieron obligados a abandonar.
Este seria el único rally del año en el que no se le permite a los vehículos que abandonan reintegrarse a la carrera.