Fiat Chrysler Automóviles (FCA), anunció que el 31 de agosto cerrarán definitivamente la fábrica del deportivo más querido y popular de las últimas décadas, dando fin al Dodge Viper, justo cuando el icono modelo de la firma cumple su 25 aniversario. En este momento solamente se producen unidades finales, todas de series especiales y ya vendidas.
Principalmente el cierre se produciría debido a las bajas ventas que significo la última generación del modelo, tan solo en el año pasado se comercializaron 630 autos, por lo que no se encontraría entre los objetivos y estrategias del grupo. El Viper era ensamblado a mano en la factoría de Conner Detroit.
Las últimas series en ser construidas equipan un motor V10 de 8.4 Litros, que entrega 645 caballos de fuerza y 600 libras-pie. Se podrán adquirir mediante un programa de personalización, para que cada cliente tenga un modelo irrepetible. Cada auto incluye una placa conmemorativa con el nombre elegido por el propietario para nombrar a su edición especial, una vez concluida la configuración la marca no hace otro vehículo igual.
El Dodge Viper se retira por la puerta grande, quemando neumáticos y consumiendo gasolina como si ni hubiera un mañana. Nunca antes había estado disponible con un propulsor de menos de 8.0 litros y caja de cambios automática.
Ya casi no quedan autos puros, y con el retiro de uno de los deportivos más auténticos del mundo, la brecha se hace cada día mayor. Deja un legado en circuitos como ningún otro y un vacío enorme en el corazón de muchos seguidores en el planeta.