El 911 que los puristas esperaban: ligero, atmosférico, manual

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El Porsche 911 R se acaba de presentar en el Salón de Ginebra. En un momento en el que el grueso de la gama 911 se acaba de pasar a la turboalimentación, y las cajas de cambio más vendidas son las PDK de doble embrague, el nuevo 911 R es una oda al purismo. Podríamos decir que es un Porsche 911 GT3 enfocado a los puristas de la conducción, con multitud de detalles old-school, un homenaje a los antiguos 911 R de competición. Su motor es atmosférico, tiene una caja de cambios manual y es el Porsche 911 más ligero de la gama.

Función y forma: así es el Porsche 911 más purista

Este homenaje rodante a los Porsche 911 R de los años 60 es patente en su esquema de colores. Con el clásico vinilado de Porsche en la parte baja de sus puertas, sus franjas longitudinales rojas son un homenaje a aquél pequeño deportivo que arrasaba en competiciones del calibre de la Targa Florio o el Tour de France. Su carrocería parece haber sido esculpida a partir de un Porsche 911 GT3, aunque prescinde de detalles aerodinámicos extremos, como es el alerón fijo trasero del GT3. Sí hereda sus llantas o su característico frontal.

En su interior nos encontramos con varias sorpresas. La mayor sorpresa es su caja de cambios. Nada de PDK, lo que tenemos delante es una caja manual de seis relaciones – desarrollada por Porsche Motorsport – como no habíamos visto en un Porsche tan potente desde hace años. Ya os adelanto que su producción – limitada a 991 unidades – está vendida en su totalidad, y su caja manual hará que el valor de estos vehículos no haga más que ascender. Se rumorea que muchas unidades han sido compradas como instrumentos de inversión únicamente.

Además de estos tres pedales, los bacquéts deportivos de fibra de carbono tienen una tapicería que los más Porschistas sabrán identificar: el tapizado “Pepita” es idéntico al de los primeros Porsche 911. Pero la verdadera fiesta está en la parte trasera. Su motor bóxer de seis cilindros opuestos es atmosférico, y mueve 4 litros de cilindrada. Heredado del Porsche 911 GT3 RS, desarrolla 500 CV a 8.250 rpm, con un par máximo de nada menos que 460 Nm a 6.250 rpm. Acelera de 0 a 100 km/h en sólo 3,7 segundos.

Puede que no sea tan eficaz como un Porsche 911 GT3 RS – un auto de competición de calle – pero con una caja manual, la implicación del conductor es mucho mayor. Su caja de cambios tiene una función de punta-tacón automática en reducciones, al estilo del Nissan 370Z. Ni los pilotos más experimentados logran un control tan perfecto del punta-tacón. Todos estos ingredientes no tendrían un sabor tan especial si no vinieran montados sobre un paquete tan ligero, dotado de un tren de rodaje tan perfeccionado.

El equipo de frenado es de calibre industrial: discos delanteros carbonocerámicos de 410 mm de diámetro en el eje delantero y 390 mm en el eje trasero. El sistema de escape es de titanio, y es el más ligero de la gama 911. Las ventanillas laterales y trasera están compuestas de plástico transparente. El capó y los pasos de rueda son de fibra de carbono. Las llantas son idénticas a las del 911 GT3 RS y están construidas en magnesio. Calza neumáticos Michelin de gama alta y tiene un autoblocante mecánico trasero.

El sistema Porsche Stability Management (PSM) ha sido especialmente calibrado para el Porsche 911 R y podemos encargar un ciguëñal – sí, un ciguëñal – opcional más ligero, que produce una respuesta más instantánea para el motor. No tiene asientos traseros, su aislamiento acústico es inferior y tanto aire acondicionado como equipo de sonido son opcionales. La suspensión delantera se puede elevar unos 30 mm – al igual que en el resto de 911 – para poder pasar correctamente por encima de los badenes o salir del garaje.

Su precio arranca en unos 175.000 euros en el mercado británico. No importa demasiado, la producción está totalmente vendida. Sólo quiero terminar el artículo agradeciendo a Porsche que se haya decidido a producir un 911 pursita que será tanto o más recordado que el Porsche Cayman GT4. ¡Gracias Porsche!

Vía DiarioMotor

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