En los últimos GP de Formula 1 la lluvia ha sido protagonista en Malasia, sin embargo este año las probabilidades son más altas
En los últimos GP de Formula 1 la lluvia ha sido protagonista en Malasia, sin embargo este año las probabilidades son más altas.
Según los pronósticos, las lluvias serán permanentes viernes, sábado y domingo y pueden tener una incidencia importante en la carrera. Entre otras razones porque en lugar de correr a las 2 de la tarde hora local se hará a las 4. Una imposición de Bernie para que el GP se dispute a una hora aceptable en las TV europeas, las 10 de la mañana.
Los pilotos temen este pronóstico. No sería la primera vez que el agua altera de forma contundente esta carrera. Recordemos 2010, cuando algunos de los favoritos cayeron en la Q1 porque la lluvia arreció en lugar de calmarse como esperaban cómodamente desde dentro de su box.
Recordemos la carrera de 2009. Fue detenida antes de cumplirse la distancia prevista por culpa de la lluvia. Ésta hizo su aparición en la vuelta 22 y provocó el caos. Cinco vueltas después, se montaron intermedios porque el agua bajó la intensidad, y apenas dos vueltas después el aguacero fue tal que se detuvo la carrera con bandera roja en la vuelta 33, tras un giro detrás del safety car.
Entre las nubes negras que oscurecieron el cielo, la lluvia que caía y el agua que levantaban los monoplazas no se veía a un par de metros. Tras un cuarto de hora de espera se declaró acabada la carrera.
En aquella ocasión la carrera comenzó una hora más tarde, pero se prevé algo muy similar este año.