Una Fórmula 1 radicalmente renovada, menos veloz y contaminante, y de presupuesto reducido emergió tras la presentación de un paquete de nuevas regulaciones financieras, deportivas y técnicas que se aplicarán a partir de 2021.
Los propietarios estadounidenses de los derechos comerciales de la F1, Liberty Media, anunciaron en Austin (EEUU) un revolucionario plan que establece límites presupuestarios, un nuevo modelo de auto y reglas que fomenten carreras más disputadas y de menor impacto negativo para el medio ambiente.
Jean Todt, presidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), destacó que la aprobación del sustancial paquete de medidas significaría un “un gran cambio en la gestión del automovilismo de élite”.
Según el plan, las escuderías se limitarán a un presupuesto de 175 millones de dólares por temporada para rendimiento sobre la pista, aproximadamente la mitad de lo que actualmente gastan los mejores equipos, y los nuevos monoplazas serán más pesados y lentos, manteniendo los motores turbo híbridos.
La temporada, que actualmente cuenta 21 carreras, también se expandirá a un máximo de 25, una cifra preocupante para muchos.
El director ejecutivo de la F1, Chase Carey, opinó en la previa del Gran Premio de Estados Unidos, que se disputa el domingo en Austin, que las nuevas reglas muestran respeto por el ADN de la competición y que el objetivo es “mejorar la competencia, la acción en la pista y hacer que el deporte sea un negocio más saludable y atractivo para todos”.
Los renovados monoplazas –que se prevé lleguen a perder entre 3 y 3.5 segundos por vuelta dependiendo del circuito- se modificarán en lo relativo a aerodinámica con un alerón delantero simplificado y ruedas más grandes, eliminación de aletas complementarias y ampliación y refuerzo de la cabina para acomodar a los pilotos más voluminosos.
Algunas piezas se estandarizarán, si no desde 2021, en los años siguientes, como los discos de freno, y las escuderías solo podrán rediseñar su caja de cambios una vez cada cinco años.
¿Veto de Ferrari?
El límite presupuestario no cubrirá los salarios de los pilotos y excluye los costos de los tres miembros mejor pagados de una escudería, pero ni eso garantizaría el respaldo de Ferrari a las medidas.
Mattia Binotto, jefe del equipo italiano, dijo que revisaría su posición y ya avanzó el fin de semana pasado que sería “una pena” ejercer el controvertido e histórico derecho de veto de la mística Scudería.
Todt, precisamente exdirector de Ferrari, añadió que la F1 aspira a liderar la creación de combustible mucho más limpio con mayor nivel de contenido renovable, hasta alcanzar el 20% en 2021. “Continuaremos trabajando en nuevas tecnologías para superar los límites”, subrayó.
Pero las reacciones contrarias no se hicieron esperar, entre ellas, las del piloto alemán Sebastian Vettel.
“La F1 va en la dirección equivocada en el tema de los autos más pesados, que es algo relacionado con la seguridad, aunque todo el mundo lo acepta. Sobre el papel, las ideas siempre son geniales. Los autos son más espectaculares ahora, antes eran más lentos”, recordó el cuatro veces campeón. “Si se traduce en mejores carreras para nosotros, si es más divertido, entonces ganamos todos. Veremos”.
En cambio, el actual líder del Mundial, Lewis Hamilton, encaró sin titubeos la nueva etapa.
“Va a ser interesante, tengo intención de vivirlo y en algún momento del año que viene comenzaré a pensar en 2021 y cómo ser pionero de esa era”, dijo el piloto británico de 34 años, que pretende conquistar su sexto título mundial el domingo.
Por: AFP