El accidente de Andrés Van Der Laat pone en evidencia la eficacia de los protocolos en el automovilismo nacional

Imágenes tomadas de la transmisión en FB

El automovilismo es una disciplina que combina velocidad, precisión y riesgo. Y aunque los incidentes forman parte del deporte, lo ocurrido el pasado domingo durante la segunda fecha del Campeonato Nacional de Automovilismo CRRL 2025 fue una contundente prueba de que la seguridad en pista está más vigente y eficaz que nunca.

Durante la Copa Scotiabank, en el trazado del Circuito de Parque Viva, el piloto Andrés Van Der Laat, de la Escudería Ideal Racing – Pindaki, sufrió un aparatoso accidente mientras competía en la categoría GT3 Spec. El vehículo número 7 perdió el control y se elevó por encima de las llantas de protección, en una secuencia que dejó imágenes impactantes.

Sin embargo, lo más relevante no fue el dramático choque, sino el desenlace: Van Der Laat salió por sus propios medios, sin lesiones de gravedad y sin necesidad de atención hospitalaria: “Fue muy fuerte, gracias a Dios solo daños materiales. Poquito golpeado nada más”, manifestó el piloto.

Este hecho vuelve a poner en el centro de la conversación el papel fundamental de la seguridad en las competencias automovilísticas. Gracias a la implementación de protocolos estrictos y al uso de equipamiento certificado, lo que pudo haber sido una tragedia terminó siendo solo un susto y un auto dañado.

Imagen con fines ilustrativos

“Lo mejor era resetear la memoria lo antes posible”, agregó Van Der Laat, quien además destacó el rol del equipo técnico y los estándares de seguridad del vehículo. “El carro tenía todos los dispositivos de seguridad y yo portaba todo el equipo requerido. Eso hace la diferencia”.

En un deporte donde fracciones de segundo pueden definir la victoria, también pueden marcar la diferencia entre la seguridad y el riesgo. La jaula antivuelco, el cinturón de cinco puntos, el sistema HANS (Head and Neck Support), el casco homologado y el traje ignífugo son elementos que hoy salvan vidas.

Pese al susto, el piloto no abandonó la fecha y continuó compitiendo en su segundo compromiso del día, la categoría TC2, donde logró un segundo lugar en la carrera, resultado que mantiene a la escudería en la primera posición general del campeonato.

“Sí, definitivamente. El carro se fue ‘under’, tomó impulso y solo veía llantas por todos lados. Primero se elevó el frente y luego cayó hacia el pavimento. Uno no lo siente tanto como se ve… debe ser la adrenalina”, finalizó.

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