A casi un año de su terrible accidente en la F4 británica y tras perder sus dos piernas y salir del coma, el joven Billy Monger es un ejemplo de tenacidad y perseverancia.
Con 18 años, Monger sigue avanzando hacia su sueño de ser un piloto profesional.
“Hace unos meses no pensaba que esto sería posible. Mucho camino por recorrer, pero el objetivo es acercarse. Gracias a Carlin Racing por hacerlo posible hoy”, escribía Billy en su cuenta de Twitter tras subirse a un Fórmula 3 del equipo Carlin, quien le respondía anunciando sus meta para este año: “¡Estás haciendo un gran trabajo Billy! Orgullosos de ser parte de tu viaje y con la esperanza de unirnos a la parrilla de la F3 Británica de 2018”.
Ese sería el destino del inglés, que ya cuenta con licencia de la FIA.